La salud y la imagen de la banca

Rubio afirma que los bancos españoles se han saneado y capitalizado, pero que el sistema de vigilancia de la autoridad monetaria debe mantenerse atento. Para recalcar ante los ejecutivos del sector que el banco emisor no bajará la guardia en este terreno el mensaje afirma que "ha seguido habiendo casos en que la gestión de ciertas entidades no se ha acomodado a los criterios de ortodoxia financiera y de respeto de la normativa, dando lugar a la puesta en marcha de los mecanismos sancionadores previstos por la ley. Es la intención del Banco de España redoblar sus esfuerzos para erradicar este tipo de comportamientos". En una alusión velada a la ruptura de la fusión entre Banesto y Central afirma que lamentablernente, en los últimos tiempos se han producido hechos que deberían haberse evitado y que han tendido a dar una imagen de nuestro sistema bancario que no se corresponde con la realidad" y hace un llamamiento a la responsabilidad de las grandes instituciones financieras españolas.

Autocarteras

El informe ratifica la lucha contra la práctica de las autocarteras en banca -adquisición de títulos propios- aunque señala que la persecución de esta práctica es atribución de la Comisión Nacional del Mercado de Valores, a quien el Banco de España prestará toda su colaboración.Mariano Rubio se declara partidario de la unión monetaria europea y afirma confiar en que "las circunstancias propicien una pronta decisión del Gobierno en ese sentido y que España se coloque así en el grupo central de países que asuman el liderazgo de su construcción".El gobernador del banco afirma que hay ejemplos a diario de la ausencia de cooperación económica entre naciones, afirmando que una muestra de solidaridad pregonada y divergencias en los hechos es el propio Grupo de los Siete a cuya ausencia de coordinación atribuye las fluctuaciones cambiarias de las principales monedas y de la persistencia de los fuertes desequilibrios en los pagos internacionales.

En su informe el gobernador indica que fue la acción concertada de las autoridades monetarias del mundo industrializado las que permitieron superar un vacío económico tras el crash de la bolsa en octubre de 1987 al decidir inyectar liquidez a las economías respectivas para solventar la reducción de riqueza que supuso la crisis.

Señala, sin embargo, que este proceso está en la base de la presión inflacionista internacional, y fue el elemento que obligó a un incremento generalizado de los tipos de interés en occidente. La puntualización tiene una gran trascendencia toda vez que es la primera afirmación categórica sobre el coste del crash hecha por una autoridad española.

El informe especifica que el sistema financiero español se ha modernizado significativamente, y que debe mantener este proceso. Respecto del mercado de valores señala que la reforma en curso apunta a mejorar la eficiencia del mercado de títulos que favorecerá al sector privado. Respecto del sector público en este tema afirma la necesidad de apelar a una colocación directa de los activos oficiales, proceso al que el Banco de España brindará toda su colaboración.

"Nos encontramos por tanto con un sistema financiero mucho más capacitado para afrontar la entrada en el mercado único europeo", dice el informe.