Los candidatos argentinos evocan el odio presente y el terror pasado para ganar votos

La crispación electoral y el nerviosismo de los dos candidatos favoritos, el peronista Carlos Menem y el radical Eduardo Angeloz, crecen en Argentina cuando se inicia el sprint final ante las elecciones presidenciales del próximo 14 de mayo. "Usted, señora, sabe como yo que el actual proceso electoral transita entre el miedo a Menem y la bronca al Gobierno radical", dijo Angeloz en un mitin en Tandil, una ciudad de la provincia de Buenos Aires. La frase resume perfectamente el marco de la fase final de las elecciones.

La evolución de la campaña electoral confirma el anticipo que hace unos meses hacía el escritor Jorge Asís al corresponsal de este periódico. Comentaba Asís que "en esta elección se disputa si es más fuerte el odio al Gobierno radical o el terror a los peronistas".Los dos candidatos juegan a fondo estas bazas: Angeloz, gobernador de Córdoba y candidato radical a la presidencia, azuza el miedo del electorado ante un posible triunfo peronista y trata de presentar a Menem como un peligro para la democracia y un factor de inseguridad.

En Tandil dijo Angeloz: "En un Gobierno del radicalismo, nunca más vendrán ni los montoneros ni los Falcon verdes, por pensar de una manera diferente". Así sugería Angeloz la asociación con los tristemente célebres vehículos, que en los días de la dictadura se llevaban a detenidos que muchas veces jamás aparecieron.

"Tiene miedo porque no le alcanza la plata para vivir. ¿Y mi prima, que tenía un hijo de 18 años, que murió en las Malvinas, cómo no va a tener miedo, si le prometen seguir derramando sangre?", dijo Angeloz en Merlo.

Con ello aludía a las palabras de Menem, semanas atrás en Ushuaia, la ciudad más austral del mundo, de que las Malvinas volverán a ser argentinas, aunque pasará mucho tiempo y costará sangre, sudor y lágrimas".

Consciente de que buen número de los muchos votantes todavía indecisos son mujeres, Angeloz se dirige a ellas en sus mítines. Casi parecen las únicas destinatarias de sus discursos.

El 'extraterrestre'

El candidato peronista recorrió la semana pasada, en el llamado tren de la esperanza, la provincia de Entre Ríos. La figura de Menem atrae a las masas, y la fuerza organizadora de los sindicatos peronistas hace que sus mítines estén bastante más concurridos que los de su contrincante radical. Un analista político y experto en sociología electoral comentaba que con frecuencia Angeloz da la impresión, en sus intervenciones, de "ser un extraterrestre" y no sintonizar con sus auditorios.En Concepción del Uruguay (Entre Ríos), Menem pronunció ante unas 5.000 personas un discurso de 43 minutos, más comprimido en contenido que los del inicio de su campaña. El candidato peronista sigue sin explicar en qué consistirá la revolución productiva que predica, pero acusa del mismo mal a su contrincante.

Se pregunta a qué partido pertenece Angeloz y por qué, si tiene una solución para los males de Argentina, no los pone en práctica ahora que gobierna.

La cuestión militar ha provocado intercambio de acusaciones entre los candidatos. Angeloz ha acusado a Menem de mantener contactos con los grupos ultraderechistas del Ejército. Menem ha replicado acusando a Angeloz por su actitud durante la reciente dictadura militar.

Dijo Menem que Angeloz "hacía muy buenas migas y vivía de fiesta en fiesta con el general [Luciano Benjamín] Menéndez, mientras muchos eran torturados en Córdoba". Y pregunta: .¿Dónde estuvieron ellos [los radicales] a partir de 1976, cuando nosotros estábamos en las cárceles de la República Argentina?".