El voto de la desconfianza
El voto popular, y no el contrincante muchas veces ausente, ha castigado a un buen número de funcionarios comunistas, integrados en los comités de distinto rango que forman el aparato jerárquico del partido, según los datos recogidos por la corresponsalía de EL PAÍS en Moscú.Una aparatosa derrota sufrió la dirección del partido de Leningrado, comenzando por el jefe de la organización regional y miembro suplente del Politburó, Yuri Soloviov, y continuando por el primer secretario de la organización municipal, para seguir con el segundo secretario de la organización regional, el alcalde de la región, el alcalde de la ciudad y el vicealcalde.
Derrotados han sido también los dos secretarios de comité de distrito del partido que se presentaban en dos de las circunscripciones electorales de Moscú.
Igualmente derrotados fueron cinco secretarios regionales del partido en Ucrania, dos secretarios regionales de Bielorrusia y la dirección del comité del partido en Minsk, la capital de esta última república. Por lo menos seis alcaldes (Moscú, Leningrado, Kíev, Wnius, Kaunas y Klaipeda) han sido vencidos en la contienda.
En Moscú se han elegido 15 del total de 26 diputados. En ocho distritos de la capital habrá una segunda ronda el 9 de abril (para decidir entre los dos candidatos mayoritarios donde competían más de dos) y en tres distritos habrá nuevas elecciones con presentación de nuevos candidatos, lo que supone una nueva oportunidad para quienes quieren volver a probar suerte alentados por la atmósfera de reforma.
Secuelas de Chernobil
En Ucrania llamaba la atención que no se hubiera anunciado anoche el resultado de la votación en solitario de VIadimir Shcherbitski, el jefe del partido en la república y miembro del Politburó, que se presentaba en Dniepropetrovsk. Los secretarios regionales de Kiev, Voroshilograd, Transcarpatia, Lvov y Chernigod habían sido derrotados.
Tanto en Ucrania como en Bielorrusia, algunos resultados eran relacionados directamente con el accidente en la central nuclear de Chernobil y reflejaban la preocupación ecológica local. Así, la elección del escritor Yuri Shcherbak, que ha criticado duramente a las autoridades ucranianas, es un triunfo de los grupos ecologistas locales. La derrota de los secretarios del partido en la región de Magiliov y Gomel, en Bielorrusia es, según medios informales locales, una consecuencia de la actitud mostrada frente a la contaminación radiactiva.
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