El protagonismo en la negociación política marca diferencias entre ETA y el Gobierno

El desarrollo de la mesa de conversaciones políticas, a la que asistan asesores y representantes de ETA y del Gobierno central con un calendario concreto de reuniones, ha constituido el centro de las entrevistas celebradas esta semana en Argel entre Rafael Vera y Antxon Etxebeste con vistas a la ampliación de la tregua, según han informado fuentes conocedoras del proceso. El principal obstáculo consiste en que ETA pretende que esa mesa sea una fase previa a la negociación política con el Gobierno, mientras el Ejecutivo mantiene que esas cuestiones deben debatirse en las instituciones vascas.

El Gobierno exige a la organización terrorista una ampliación indefinida de la tregua mientras ETA reclama el compromiso del Ejecutivo a aceptar un calendario de reuniones con una mesa a la que asistan asesores y delegados por ambas partes.ETA aspira a que el Ejecutivo amplíe su grupo de representantes en Argelia con algún destacado dirigente del PSOE de cara a reforzar el carácter político de sus conversaciones. Por su parte, el Gobierno considera positivo y práctico que acuda a la mesa de Argel un alto dirigente de ETA en el sur de Francia de modo que se tenga la seguridad de que se está dialogando con quienes controlan y manejan directamente toda la organización terrorista.

ETA pretende que el desarrollo de la mesa de conversaciones constituya una fase previa a la negociación política entre la organización terrorista y el Gobierno, mientras el Ejecutivo defiende rotundamente que el Parlamento vasco y los partidos son el foro de debate de esas cuestiones. El Gobierno pretende que Herri Batasuna acuda a las instituciones y sea el conjunto de las fuerzas políticas vascas quien decida sobre esas cuestiones.

Esta postura del Gobierno no es compartida por la organización terrorista que procura negociar (directamente con altos representantes del Ejecutivo de Madrid.

Estas divergencias han constituido el centro de la discusión en las últimas entrevistas entre el secretario de Estado para la Seguridad, Rafael Vera, y el portavoz de ETA, Antxon Etxebeste. Herri Batasuna dijo ayer que el sábado tuvo lugar una reunión en Argel que discurrió por momentos muy difíciles al tratar de ajustarse las. diferentes posturas para continuar el proceso de diálogo.

Fuentes conocedoras del citado proceso aseguraron a este periódico que las conversaciones entre Vera y Antxon tuvieron que ampliarse este fin de semana dado que existían serias divergencias de cara a la ampliación de la tregua. Dichas fuentes explicaron que la conversación discurrió por circunstancias muy delicadas que pudieron hacer fracasar la ampliación de la tregua.

Fuentes del Ministerio del Interior no quisieron comentar ayer el resultado de esas reuniones y emplazaron a que sea la organización terrorista quien trasmita su decisión final a través del diario Egin, como suele realizar habitualmente.

Personas conocedoras del proceso reconocieron que la tregua ha sido bilateral como lo prueba que durante estos dos meses la policía no haya practicado ninguna detención relacionada con la organización terrorista. Dichas fuentes han reconocido incluso que no detendrían a un comando si lo tuvieran localizado para evitar un posible fracaso del proceso de paz. Esta circunstancia no impide, en opinión de dichas fuentes, que los servicios de información de la Policía continúen trabajando e investigando de cara a una posible ruptura de la tregua.

El Gobierno argelino continúa ejerciendo su papel de moderador y mediador del proceso y ha logrado efectos positivos para acercar posturas en momentos de serias divergencias que podrían haber hecho fracasar las conversaciones.