Descubiertos 230 titulares de primas únicas con fraude superior a 50 millones

La lista de suscriptores de pólizas de seguro con prima única entregadas por La Unión y El Fénix a finales del pasado mes a Hacienda, ha permitido encontrar una importante bolsa de fraude fiscal. De las 17.000 pólizas declaradas, unos 230 titulares con cantidades superiores a 50 millones de pesetas se nutren del llamado dinero negro, según señalan fuentes de Hacienda.

Una vez terminadas todas las comprobaciones, los inspectores de Hacienda procederán a localizar y visitar a los titulares de estas pólizas para evaluar el posible fraude. Si éste supera los cinco millones de pesetas, los expedientes, una vez terminados, serán enviados al fiscal para que inicie un proceso por la vía penal por constituir delito fiscal. Si son inferiores a esta cantidad, se aplicará una sanción administrativa. En este sentido, la dirección general de Inspección del Ministerio de Hacienda, está elaborando una circular con las instrucciones a seguir por los inspectores encargados del procedimiento.

Las fuentes de Hacienda señalan las dificultades con que se va a encontrar la administración tributaría para llevar hasta sus últimas consecuencias el procedimiento sancionador o penal contra los defraudadores detectados por primas únicas.

'Dinero negro'

El problema es que, una vez comprobado el fraude, hay que demostrar que efectivamente se trata de dinero negro no declarado por el suscriptor de primas únicas en su IRPF. Aquí es donde radica la verdadera bolsa de fraude, ya que la no declaración de las plusvalías generadas por primas únicas representa sólo una pequeña parte de la ocultación fiscal y ésta es relativamente fácil de comprobar una vez obtenidas las listas.Cuando se verifique que se trata de dinero negro si éste se ha generado por operaciones realizadas cinco años antes de que se puedan enviar los expedientes de delito fiscal, entonces no hay nada que hacer. Según la legislación vigente, las deudas tributarias prescriben en el plazo de cinco años. En este caso, la única sanción aplicable sería la de no declaración en el impuesto del patrimonio de las plusvalías generadas por la rentabilidad obtenida de estas primas. Por todo ello, Hacienda ve con muy buenos ojos las legislaciones de algunos países que permiten levantar esta prescripción de cinco años para casos excepcionales.

Las primas únicas suponen un filón que se va a explotar en los planes de la inspección para este año. Hacienda va a utilizar estas listas y las que enviarán otras compañías cuyo caso está pendiente de resolución judicial ante la negativa a entregar su relación de clientes, como el hilo del que se va a sacar el ovillo de buena parte del dinero negro que no se declara a Hacienda, como se hizo con los titulares de tarjetas de crédito. En total, se inspeccionará a unos 50.000 potenciales contribuyentes, cantidad que podría aumentarse si las listas de primas únicas dan de sí todo lo que se espera.