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Defensa compra el primer terreno para el polígono de Anchuras

Carlos Yárnoz

El Ministerio de Defensa ha adquirido ya las primeras hectáreas -unas 1.500- del terreno previsto para el futuro polígono de tiro de Anchuras, que tendrá unas 6.700 hectáreas de extensión. Esa primera adquisición es una amplia finca perteneciente hasta ahora a la Asociación Agropecuaria El Cijaral, cuyo principal accionista es Jaime Soto, según personas conocedoras de la operación.

La citada asociación ha percibido a cambio de esas 1.500 hectáreas otra finca de similar extensión, situada en Cabañeros y propiedad del Ministerio, ya que el departamento adquirió en 1987 la finca de Cabañeros porque, en principio, estaba previsto que el polígono se instalara en esa zona, hoy convertida en parque natural.

Fuentes del Ayuntamiento de Sevilleja de la Jara, en cuyo término municipal se encuentran los terrenos ahora comprados por Defensa, señalaron ayer que desde el mes pasado se sospechaba una pronta venta de la finca, ya que a comienzos de diciembre se organizó en la misma una gran cacería, en el curso de la cual fueron abatidas varias decenas de animales. La asociación El Cijaral utilizaba la finca, además de otras 150 hectáreas arrendadas al Ayuntamiento de Sevilleja, para cacerías. El terreno estaba vallado con una red metálica electrificada para impedir la salida de animales.

Una permuta similar de terreno está a punto de cerrarse entre Defensa y la familia Moro, propietaria de más de 2.000 hectáreas situadas dentro de los límites del futuro campo de tiro.

Frente a estas dos importantes adquisiciones hechas por Defensa, ningún vecino de los pueblos afectados por el polígono de tiro ha vendido aún tierras al Ministerio, según aseguran en los correspondientes ayuntamientos. En principio, es probable que muchas de las compras de ese tipo se realicen mediante expropiaciones, siempre que los vecinos rechacen antes las ofertas que les haga Defensa.

Escuadrón de reconocimiento

De otro lado, el Ejército del Aire ha comprado por 2.400 millones de pesetas ocho viejos aviones Pliantom, usados en los últimos años por la Guardia Nacional de EE UU en la base de Kentucky. Los aparatos están ya en la base de Torrejón. Son biplazas y disponen de un sistema para reabastecimiento en vuelo.Junto con otros cuatro aviones de similares características adquiridos por España en 1972, los Pliainton integrarán un escuadrón de reconocimiento fotográfico, para lo que se les instalarán cámaras de rayos infrarrojos.

Es ésta una más de las adquisiciones de material usado comprado por el Ejército del Aire en los útimos meses. El año pasado se compraron a Noruega dos viejos aviones P3 Orion de patrulla marítima y llegaron a España los dos viejos Boeing 707 adquiridos en EE UU, que están siendo empleao los para los viajes oficiales de los Reyes y el presidente del Gobierno, así como para reabastecer de combustible a otros aparato, más pequeños.

También en el terreno aeronáutico, las empresas españolas CASA, Sener y Bazán han creado, junto con la británica Rolls-Royce, la sociedad Industria de Turpropulsores, que participará en el desarrollo del motor para el Avión de Combate Europeo. La nueva firma construirá una fábrica cerca de Bilbao que empezará a funcionar en 1992.

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Sobre la firma

Carlos Yárnoz
Llegó a EL PAÍS en 1983 y ha sido jefe de Política, subdirector, corresponsal en Bruselas y París y Defensor del lector entre 2019 y 2023. El periodismo y Europa son sus prioridades. Como es periodista, siempre ha defendido a los lectores.

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