La propuesta de precios agrarios de la Comisión Europea perjudica a España

FÉLIX MONTEIRA / VIDAL MATÉ La Comisión Europea aprobó ayer en Estrasburgo su propuesta de precios agrarios para la campaña 1989-1990. La nueva propuesta es perjudicial para los Estados mediterráneos de la CE y en especial para España, que deberá negociar el acuerdo en Consejo de Ministros como presidente de turno de la Comunidad Europea durante el presente semestre.

El cuadro de futuros precios agrarios presentado por el nuevo comisario de Agricultura, el irlandés Ray Mc Sharry, no contiene muchas novedades sobre lo esperado, dentro de¡ proceso de ajuste iniciado por la Comunidad Europea.La congelación de la mayor parte de los precios y las reducciones significativas en otros, con especial incidencia en producciones mediterráneas, colocan al ministro de Agricultura español, Carlos Romero, en una tesitura delicada, si quiere lograr su objetivo de alcanzar un acuerdo definitivo por parte de los ministros de la CE en el mes de abril.

La especial incidencia negativa para nuestro país es el proyecto de desmantelar los llamados Montantes Compensatorios Monetarios (MCM), un mecianismo agri-monetario que actúa para equilibrar las diferencias en los valores de las monedas de los distintos países comunitarios.

La fuerte revalorización de la peseta ha provocado una espiral que ha situado a España con montantes positivos del 5% en carne de vacuno y leche y sus derivados, además de un 4,2%, en cereales, un 1,6% en aves y huevos y un 1 % en vino. Aunque estos porcentajes varían semana a semana, las producciones españolas no han dejado de experimentar una subida de montantes desde el pasado 28 de noviembre.

La propuesta de la Comisión Europea es eliminar totalmente los MCM positivos de la República Federal de Alemania y Holanda y reducir un tercio los españoles, los más altos, cuando hace un año la situación era la contraria. Ello se traducirá en una caída de los precios ínternos de garantía o retirada de los productos en la misma proporción, lo cual perjudica a los productores, pero beneficia la lucha conmtra la inflación. Los Montantes Compensatorios Monetarios positivos subvencionan las exportaciones y penalizan las importaciones.

La propuesta de precios de la Comisión se resume en una congelación de precios para la mayor parte de las producciones a nivel comunitario. En el caso de España, se produce una subida en los precios de las producciones donde, de acuerdo con el Tratado de Adhesión, es preciso equiparar cotizaciones, como son los casos del vino, oleaginosos y el aceite de oliva.

Reducción de precios

Para el sector agrario español, la propuesta aprobada por la Comisión supone una reducción de] precio base de la remolacha en un 5%; los vinos de mesa experimentarán un incremento entre el 4,8% y el 12,8% la colza, el girasol y la soja tendrán una subida en el precio indicativo del 3,7% y se produce un recorte de tres ECU verde (unidad europea de cuenta para la agricultura, equivalente a unas 154 pesetas) por tonelada de arroz. Para los agrios, el objetivo es reducir un 7,5% en dos años.

España sólo está obligada es este sector a seguir una evolución paralela a la de la Comunidad Europea, pero los exportadores ya están muy castigados por la revalorización de la peseta. En los productos ganaderos, los precios en España se mantendrán congelados para el vacuno, el ovino y el porcino. La leche de vaca y la mantequilla experimentaran ligeras reducciones que oscilan entre el 2,5 % y el 3,1 %.

Los precios de la cebada y el centeno se aproximarán definitívamente a los existentes en el conjunto de la Comunidad, al igual que se hizo el pasado año con el trigo y el maíz. Los cereales tienen los precios congelados, aunque van a registrar una fuerte bajada que podría situarse en el 6%.