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Una acción oportuna y humanitaria

La idea de recogida de aportaciones para la construcción en Armenia del centro materno-infantil promovida por tres periódicos de los más importantes de Europa es muy importante y oportuna.A consecuencia del terremoto, numerosos niños han quedado inválidos. Lo más doloroso era vernos ante la necesidad de amputar brazos y piernas; a niños pequeños. Muchos niños presentan lesiones que exigen una prolongada terapia de recuperación en un centro especial. Por cierto, hemos recibido la propuesta de una organización británica para la construcción de una fábrica de prótesis infantiles, lo que podría unirse a la campaña de los periódicos para la realización también de este proyecto.

Existe otra circunstancia. Los niños que han sufrido el terremoto presentan serias alteraciones psíquicas y psicológicas. Deben permanecer bajo observación permanente. Actualmente esto se lleva a cabo en Eriván, en un centro provisional, organizado por el Centro de Salud Mental y el Instituto de Psiquiatría, en el que están ingresadas casi 300 personas.

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Necesitan mucho tiempo para la rehabilitación, máxime cuando se trata de niños, puesto que su psique es muy vulnerable. Recuerdo a una niña de tres años que ha sido rescatada de los escombros, que ha perdido a sus padres. Aún no es consciente de su tragedia, pero dentro de varios años empezará a recordar y habrá que ayudarla. Por eso es tan necesario el centro para el seguimiento de estos niños y su recuperación.

Otro aspecto muy importante que ilustraré con un ejemplo. En el hospital de urgencias Sklifasofski, de Moscú, se encuentra ingresada una mujer embarazada de cuatro meses, a la que han sido amputadas las dos piernas.

Muchas otras mujeres jóvenes han pasado por el infierno. En el futuro, probablemente, también querrán tener hijos. ¿En qué situación se encontrarán éstos?

Recuerdo el nombre de la primera mujer que dio a luz después del terremoto: Laura Jachatrian. ¿Cómo irá evolucionando su niño? Hay muchas mujeres evacuadas de la zona de desastre que esperan hijos. Para ellas y sus niños es indispensable ese centro materno infantil. En mi opinión, éste debe tener tres servicios: el de diagnóstico, para las futuras madres; el de partos y el de rehabilitación.

La creación del centro podría suponer, creo yo, unos 3040 millones de dólares. Aun cuando en la campaña emprendida se recojan cinco-seis millones, con este dinero se podrá adquirir equipos médicos, lo más importante del centro. Si esta idea no se les hubiera ocurrido a los periodistas, de todas maneras habría que construir el centro, puesto que en la zona del desastre no ha quedado ni una maternidad.

En cualquier caso, el Ministerio de Sanidad está dispuesto a participar en la realización del proyecto, aportará sus recursos y ayudará en el diseño. El 11 de enero, en el Ministerio, se va a celebrar una reunión en la que participará el ministro de Sanidad de Armenia, en la que se estudiará el tema de la protección materno-infantil.

La iniciativa de los periódicos es muy oportuna y humanitaria.,

Evguení Chazov es ministro de Sanidad de la Unión Soviética.

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