_
_
_
_

Una nueva ordenanza prevé la concesión automática de licencias municipales a partir del próximo año

Juan Carlos Sanz

El Ayuntamiento de Madrid otorgará la mayor parte de las licencias municipales de construcción y actividades con la simple petición de los interesados, según la nueva ordenanza de tramitación de licencias y control urbanístico que ultima la corporación. Las autorizaciones se entenderán concedidas, aunque no exista resolución expresa, una vez vencidos los plazos que marca la ordenanza. Los servicios municipales reconocen que actualmente no es posible saber con exactitud en qué fase de tramitación se hallan las peticiones.

Mientras tanto, los responsables municipales hacen un llamamiento a los vecinos para que denuncien los casos de corrupción entre los funcionarios del Ayuntamiento. En varias ocasiones se ha constatado que unos servidores públicos han exigido una compensación económica para tapar los problemas legales de un solicitante. Las habituales tardanzas en las concesiones favorecen este tipo de corruptelas.La nueva ordenanza municipal de tramitación de licencias y control urbanístico, que se encuentra en fase de información pública, entrará en vigor a principios del próximo año. El Ayuntamiento pretende con esta norma que las relaciones con los vecinos sean más fluidas y que "las intervenciones de la Administración se limiten a los casos en que realmente lo exija la vida de la comunidad".

Algunas actuaciones de conservación y acondicionamiento de inmuebles, dada su escasa entidad técnica e impacto urbanístico, serán autorizadas con una simple comunicación al Ayuntamiento. Para el resto de las actividades sometidas a licencia se establecen dos procedimientos (abreviado y normal), según la complejidad técnica del proyecto. En ambos casos se establecen plazos de caducidad -uno y dos meses, respectivamente- para que el Ayuntamiento resuelva. Si la licencia se refiere a actuaciones que no requieran la ocupación de la vía pública o de bienes de dominio público, se entenderán concedidas por silencio administrativo.

Contabilizar los datos sobre licencias municipales resulta difícil, según fuentes del área municipal de Descentralización y Coordinación Territorial. Los registros obran en poder de las distintas juntas municipales de distrito y aún no han sido sistematizados, aunque los ingresos en las arcas municipales por derechos y tasas de licencias superaron, en 1987, los 1.600 millones de pesetas.

Mientras no se complete el seguimiento informático de la tramitación de las licencias, indican flientes municipales, no será posible conocer los datos con exactitud. La transferencia de la capacidad de decisión a las juntas de distrito, junto a la falta de coordinación entre los distintos distritos, han originado una situación de descontrol.

Distrito de Centro

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Una aproximación a los datos de 1987, facilitada por el área de Descentralización y Coordinación, revela que se concedieron unas 13.370 licencias de obras de! las 19.250 solicitadas. Sin embargo, en total se incoaron más de 13.000 expedientes de denuncias por presuntas infracciones en obras. En el distrito de Centro se produjo el mayor número de autorizaciones de licencias (1.000), aunque también se registró la cifra más elevada de solicitudes (1.774) y de denuncias de obras (1.600). La actividad de construcción en el distrito de Mediodía fue la más baj a de Madrid, ya que sólo se concedieron 151 licencias.

En cuanto a licencias de actividades, industriales o comerciales, las denegaciones alcanzaron la cifra de 1.800. Se concedieron 9.000 licencias para las denominadas actividades inocuas, v casi 7.000 de actividades calificadas.

Las juntas de distrito clausuraron 1.000 locales que no contaban con licencia de apertura o que no reunían las condiciones establecidas. También se formularon alrededor de 12.000 denuncias por aperturas irregulares de locales y se impusieron 8.360 multas.

Ventanilla especial

J. C. S., A los servicios jurídicos del Ayuntamiento llegan anónimos que denuncian la existencia de una ventanilla especial para agilizar, mediante una compensación económica, la concesión de licencias. Los anónimos son investigados y, si se comprueba alguna irregularidad, el Ayuntamiento pasa la denuncia a los tribunales. Un portavoz municipal dice que existe "la idea equivocada de que el Ayuntamiento no tiene interés en combatir la corrupción".

El caso más grave de corrupción entre funcionarios municipales en los últimos años se produjo el pasado agosto, cuando el ingeniero técnico de la Junta Municipal de Arganzuela Jaime Bersabé fue acusado de haber exigido cuatro millones de pesetas al industrial Jesús Ribera Galiano para agilizar la tramitación de una licencia. Contó con la colaboración del también ingeniero técnico Francisco Enrique Bertrán, quien negoció directamente con el empresario Ribera. A éste se le exigía una colaboración para solucionar un proyecto de reforma de una nave de la calle de Bolívar.

El 16 de septiembre, el induustrial Alfredo Vicente Mora Rubio denunció también en la Junta de Arganzuela que había recibido presiones de técnicos municipales (entre los que citó a Bersabé) para que, mediante el pago de cinco millones, se taparan las deficiencias apreciadas en su empresa Giresa, situada en la calle del Teniente Coronel Noreña.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Sobre la firma

Juan Carlos Sanz
Es el corresponsal para el Magreb. Antes lo fue en Jerusalén durante siete años y, previamente, ejerció como jefe de Internacional. En 20 años como enviado de EL PAÍS ha cubierto conflictos en los Balcanes, Irak y Turquía, entre otros destinos. Es licenciado en Derecho por la Universidad de Zaragoza y máster en Periodismo por la Autónoma de Madrid.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_