El nuevo Parlamento controlará al presidente de la URSS
El futuro Parlamento permanente soviético controlará la amplia concentración de poder que recibirá el presidente de la URSS, según las enmiendas definitivas a la Constitución publicadas ayer por primera vez en su totalidad. Las enmiendas, que dan luz verde a la reforma política de Mijail Gorbachov, fueron aprobadas por mayoría absoluta el 1 de diciembre por el Soviet Supremo de la URSS, e incluyen esta cláusula, que no existía en el texto sometido a discusión pública ni había sido mencionada cuando se explicaron los cambios introducidos en el proyecto.
Esta cláusula da al Soviet Supremo de la URSS el "derecho a anular las disposiciones del presidente del Soviet Supremo de la URSS". Esta facultad, recogida en el punto 18 del artículo 113, somete al presidente al control parlamentario y amplia los poderes del Soviet Supremo de la URSS.En la variante inicial de la Constitución, el Soviet Supremo tenía tan sólo el derecho de anular las disposiciones del Consejo de Ministros de la URSS y las de los gobiernos de las repúblicas federadas, si éstas no se adecuaban a la Constitución. En la versión definitiva tiene derecho a anular también las disposiciones del Presidium del Soviet Supremo, órgano colegiado en la jefatura del Estado, que mantiene su existencia.
El proceso de redacción, a diferencia de otras ocasiones en el pasado, ha favorecido esta vez a los, partidarios de un equilibrio de poder y ha salido al paso de los temores de quienes se sentían alarmados por la amplia concentración de competencias en manos del presidente; las disposiciones de éste escapaban de todo control parlamentario, según había denunciado, entre otros, el prestigioso jurista Boris Kurashvili
Derecho al veto
Anatoli Lukianov, miembro suplente del Politburó, indujo a creer que el poder del presidente no se había alterado, ya que, según afirmó el 29 de noviembre, no se habían introducido cambios sustantivos en sus competencias. El presidente lleva la dirección general del país, firma leyes, presente informes, dirige el Consejo de Defensa, propone candidatos a la presidencia del Consejo de Ministros y a los puestos del Comité Constitucional y dicta disposiciones. Éstas podrán ahora ser vetadas por el Parlamento.
Pocas horas antes de las afirmaciones de Lukianov, Gorbachov había sugerido la existencia de: limitaciones a las competencias del presidente. En su discurse ante el Soviet Supremo, Gorbachov se refirió a un sistema en el cual el presidente "tenga suficientes competencias para organizar el trabajo del Soviet Supremo y su Presidium, y al mismo tiempo excluya una concentraci,5n de poder desmesurada en unas solas manos". "Dicho de otro modo", continuó el líder, "se conserva la colegialidad tradicional del sistema soviético en la resclución de los problemas claves del Estado" y con ello "se eliminan los fundamentos de los temores expresados por algunos de los participantes en el debate público".
Las modificaciones constitucionales han hecho claras concesiones a los intereses de las repúblicas bálticas, opinan observadores políticos soviéticos. Ha sido eliminada la fórmula que daba al Congreso de los Dipu
tados de la URSS (el nuevo Parlamento que coexistirá con el Soviet Supremo) la posibilidad de formar nuevas repúblicas y regiones autónomas. Eliminado ha sido también el derecho a anular las leyes republicanas, contemplado para el Congreso en la primera redacción constitucional. También ha desaparecido unacláusula según la cual el Soviet Supremo de la URSS examinaba las cuestiones más importantes en las relaciones entre nacionalidades.El Presidium del Soviet Supremo de la URSS velará por al armonía constitucional y legal entre las repúblicas y el centro y el comité de vigilancia constitucional -23 miembros y, entre ellos, representantes de todas las repúblicas- dará los dictámenes sobre violaciones constitucionales. Éstos tienen la facultad de suspender la ejecución de las disposiciones conflictivas.
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