Basura

Tras varios intentos frustrados para pagar en el Servicio de Recaudación de la Diputación la tasa municipal de basuras dentro del plazo, el pasado día 3 de noviembre decidí armarme de paciencia y colocarme en la cola. Tardé cuatro horas y cinco minutos en llegar al mostrador de pagos, exactamente desde las 8.35 hasta las 12.40. Que para pagar 4.000 pesetas como tasa de basuras haya que estar en una cola más de cuatro horas induce a pensar que lo que es una verdadera basura es la organización de ese Servicio de Recaudación. En aquella maldita cola había personas de edad avanzada cuyo sistema circulatorio debió resentirse. Desde luego, yo acabé con dolores de piernas, por lo que considero que he sido maltratado por negligencia.Para pagar esa tasa de basuras tuve que desatender mi trabajo durante toda la mañana. Como otros muchos. Y esto nos cuesta dinero a todos. Excelentísimos Ayuntamiento y Diputación, ¿no existen, en plena época del dinero electrónico y de la informática, otras modalidades de pago menos dañinas y más cómodas para el ciudadano? Yo -que soy profano en la materia- me ofrecería a sugerir algunas.-