_
_
_
_
_
GENTE

Cristóbal Martínez Bordiú,

marqués de Villaverde, lloró abrazado a uno de los conferenciantes que glosó la figura de su suegro, el anterior jefe del Estado, Francisco Franco, en un acto celebrado en Oviedo, organizado por la Asociación de Defensores de esta ciudad, y al que también asistió la hija del general, Carmen Franco. "Siempre que se habla de mi suegro", comentó el marqués, "me sucede esto. Era un hombre excepcional, y soy un privilegiado por haberle conocido". El acto de homenaje a Franco se celebró a escasos metros y pocos minutos del acto de entrega de los Premios Príncipe de Asturias, presidido anteayer por don Felipe de Borbón.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_