Dirigentes liberales japoneses denuncian una supuesta campana antiimperial.

Varios dirigentes del Partido Liberal Democráta de Japón (PLD, en el poder), aseguraron ayer que el Gobierno debe tomar medidas contra lo que califican de campaña antiimperial, principaImente de diarios sensacionalistas británicos, pero también de algunos japoneses. Entretanto, el emperador Hirohito, de 87 años de edad, continuaba ayer en una situación estable, aunque bajó su temperatura y necesitó una nueva. transfusión sanguínea, de 200 centilitros.Michio Watanabe, presidente del Instituto para Investigaciones Políticas del PLD, calificó de insulto para el pueblo japonés" los comentarios publicados la semana pasada por los diarios sensacionalistas británicos The Sun y The Daily Star, que recordaban el protagonismo histórico de Hirohito durante las campañas militares japonesas y lo calificaban de "ser diabólico" a quien "espera su lugar en el infierno" por sus "crímenes de guerra".

Según Watanabe, Japón debe expulsar a los corresponsales de estos diarios", en caso de que los tengan. Se debe también estudiar, añadió, la posibilidad de iniciar acciones legales contra estos diarios británicos porque, afirmó, "la libertad de Prensa tiene sus límites".

En cuanto al pasado del emperador, Watanabe se remite al Tribunal de Crímenes de Guerra -"establecido por los propios aliados", dijo- que, después de la derrota de Japón, en la Segunda Guerra Mundial, no consideró al emperador responsable de ningún crimen.

Otros dirigentes del PLD criticaron a la Prensa japonesa por la manera de informar sobre la salud del emperador y, en particular, por el desliz de la edición en inglés del diario Mainichi, que en su edición del día 26 publicó un editorial en el que se comentaba la muerte del emperador Hirohito, lo que ha sido motivo en el citado diario para la destitución de cuatro altos cargos.

Movimientos de izquierda piden que el relevo de Hirohito sirva para acabar con el sistema imperial, mientras el secretario general del PLD, Shintaro Abe, precisa que su partido intentará contrarrestar la campaña contra el emperador promovida, según él, por el partido comunista.