España prepara una iniciativa de paz para Oriente Próximo

España estudia una iniciativa de paz para Oriente Próximo cuan do, durante el primer semestre del año próximo, asuma la presidencia de la Comunidad Europea (CE), según fuentes diplo mátícas españolas en la capital belga. "Es posible que en Oriente Próximo se produzca una iniciativa española, y para prepararla hemos creado un grupo de trabajo", comentó a este corresponsal el titular de Exteriores, Franciso Fernández Ordófiez, que rehusó dar más detalles.A petición de la presidencia del Gobierno y encabezado por Luis Jordana de Pozas, ex embajador de España en Líbano y buen conocedor de Oriente Próximo, y con la colaboración de José Ramón Remacha, ex cónsul general en Jerusalén y autor de una tesis doctoral sobre la ciudad santa, un grupo de diplomáticos españoles ha efectuado un estudio preliminar que otros expertos continuarán en septiembre. Paralelamente, Exteriores ha encargado a la facultad de Económicas de la universidad Autónoma de Madrid un informe sobre la eventual creación, tras la hipotética conclusión de la paz, de un fondo de ayuda financiera y técnica a las partes implicadas en el conflicto arabo-israelí.

Aunque no está aún diseñada la iniciativa, que debería contar con el respaldo en los otros 11 socios comunitarios, ésta consistiría en alentar una conferencia de paz internacional patrocinada por la ONU que los doce apoyaron, por primera vez públicamente, en febrero de- 1987.

Exteriores cree que la coyuntura internacional es propicia a la solución de los conflictos regionales, pero los diplomáticos consultados insister. en que "no hay que echar las campanas al vuelo". "I_a situación en Oriente Próximo es muy movediza", opina un miembro del grupo de expertos, "y no tendremos claro hasta el último momento si debemos convencer a nuestros socios -de dar algún paso conjunto para intentar sacar a la región del atolladero".

La reciente decisión de Hussein de Jordania de romper sus lazos legales con Cisjordania hatrastocado el escenario. La posible formación de un Gobierno palestino en el exilio y la eventual aceptación por la OLP de las resoluciones 242 y 338 de la ONU, que implican un reconocimiento de Israel, pueden acentuar la evolución del conflicto.El papel de Arafat

El líder palestino, Yasir Arafat, pronunciará a mediados de septiembre un importante discurso ante el Parlamento Europeo poco antes de la reunión del Consejo Nacional Palestino, Parlamento de la OLP. Después, se dirigirá también a la Asamblea General de la ONU. "Creo que Arafat hará nuevas propuestas", afirmó hace un mes el jefe de la diplomacia griega y actual presidente del Consejo de Ministros de la CE, Karolos Papoulias, en una entrevista al diario kuwaití Al Qabas. A renglón seguido, invitó a sus homólogos comunitarios a reunirse con Arafat.

El factor decisivo para la adopción de una iniciativa comunitaria encabezada por Madrid será el resultado de las elecciones generales de noviembre en Israel. Una victoria laborista podría incitar a la diplomacia española a echarse al ruedo porque el Partido Laborista, que encabeza Simón Peres, es, a diferencia del Likud, dirigido por el primer ministro, Isaac Rabin, favorable a una conferencia internacional. A su paso en julio por Madrid, el brazo derecho de Peres, Josef Beilin, afirmó que España, durante la presidencia europea, "puede contribuir al proceso de paz, cuya fase más importante será en 1989" y los responsables árabes consultados por el Palacio de Santa Cruz comparten también esta opinión.

Hace año y medio, los doce se pronunciaron a favor de la conferencia. El -entonces presidente del Consejo de Ministros de Exteriores, el belga Leo Tindemans, inició una gira por Oriente Próximo, pero las discrepancias entre laboristas y derechistas en el Gabinete israelí y el veto del Reino Unido al mantenimiento de contactos con Siria -Londres acusaba a Damasco de promover el terrorismo- le obligaron a interrumpir su misión.