Solana anuncia la enseñanza obligatoria hasta los 16 años, y la reforma de la formación profesional

El ministro de Educación y Ciencia, Javier Solana, afirmó ayer su voluntad negociadora con "los agentes implicados en el proceso educativo" para debatir su "reforma en profundidad". Como ejes de esta reforma, anticipó la extensión de la educación obligatoria hasta los 16 años, modificación de la formación profesional y ampliación de la educación en las edades inferiores a seis años. Mientras tanto, la Comisión Episcopal de Enseñanza y Catequesis criticó la. ausencia de los padres en el proyecto de reforma y la situación de: la enseñanza de la religión.En unas declaraciones a Efe, Solana anunció "una presión sobre el ministro de Hacienda para que una parte cada vez más importante de los recursos públicos" se destine a educación, si bien anticipó que se siente "solidario con el con ' junto del Gobierno". En cuanto a la investigación científica, aseguró que en los Presupuestos Generales del Estado para 1989 "habrá una partida de gran importancia para ( ... ) investigación y desarrollo tecnológico", ya que, explicó, "no seremos un país a la altura del tiempo que vivimos si no hacemos un esfuerzo, de esa envergadura".

Solana pidió comprensión a los profesores, a quienes recordó: "El esfuerzo que la sociedad realiza tiene que ser correspondido por un afán de superación en su trabajo, pues, en gran parte, la calidad de la enseñanza y el éxito del reto del futuro está en sus manos". El titular de Educación y Ciencia señaló que no cree que las reivindicaciones de los profesores sean sólo económicas, y que algunas de las demandas quedaron ya resueltas con el acuerdo adoptado por el Gobierno a principios de julio, lo que puede contribuir, afirmó, "a aliviar tensiones".

Voluntad negociadora

Ante la proximidad del nuevo curso académico, el ministro de Educación y Ciencia expresó su deseo de que comience "en un clima de concordia, serenidad y responsabilidad". Anunció su intención de propiciar para finales de septiembre o principios de octubre "unas negociaciones que consideren los problemas de la educación a corto, a medio y a largo plazo". Aseguró que quiere "defender las aspiraciones legítimas de los enseñantes", ya que "la dignificación de la función docente me parece", dijo, "de extraordinaria importancia".El ministro de Educación y Ciencia reconoció que los últimos conflictos de profesores han producido "algún daño" a la enseñanza pública, pero negó que haya habido un trasvase de estudiantes del sector público al privado. Subrayó que "no habrá calidad de la enseñanza si no existe calidad en la enseñanza pública". Añadió que, "para un socialista, la enseñanza pública juega un papel absolutamente esencial en el desarrollo y la transformación del país, porque es fundamental para conseguir la igualdad de oportunidades de los ciudadanos".

Solana calificó la ley de la Ciencia y el Plan Nacional de Ciencia e Investigación como "un paso de enorme importancia", sin precedentes "en la historia reciente de nuestro país". Evaluó la fuga de cerebros como un elemento de "la historia desgraciada", dijo, "de nuestro país", y aseguró que "ya no es una realidad". Agregó que, por e contrario, "en algunas de las disciplinas universitarias en los últimos dos años ha habido un flujo de personalidades de prestigio internacional que han venido a centros de investigación españoles a pasar su año sabático".

Por otra parte, según informa Europa Press, la secretaria general técnica de la Comisión Episcopal de Enseñanza y Catequesis, María Rosa de la Cierva y Hoces, declaró que "la situación de la religión en el proyecto de reforma educativa es inadmisible", ya que no se garantiza que esta enseñanza sea impartida en las mismas condiciones que las asignaturas fundamentales, a pesar, según dijo, de que "el 90% de los alumnos reclaman la formación religiosa en la enseñanza general básica". Estas afirmaciones se produjeron en Pamplona, en la clausura de un curso de profesores de religión celebrado en la facultad de Teología de la universidad de Navarra.

De la Cierva dio cuenta del informe remitido al anterior ministro de Educación, José María Maravall, al que se denunció la ausencia de los padres en el proyecto de reforma educativa. La secretaria general técnica de la Comisión Episcopal de Enseñanza y Catequesis expresó su esperanza de que estas críticas sean atendidas por el nuevo ministro, dado que Javier Solana, según dijo, es "un hombre dialogante".