Esquilache, la melancolía y un soldado español

Algunos de los mejores. directores de cine español están rodando películas para la próxima temporada. Manuel Gutiérrez Aragón acaba de terminar Malaventura, rodada en Sevilla y Madrid. Antonio Mercero ha finalizado en Zamora El tesoro, basada en la novela de Delibes. Josefina Molina ha elegido adaptar Un soñador para un pueblo, de Buero Vallejo, y narrar los últimos días de gobierno de Esquilache, ministro de Carlos III. José Luis Cuerda rueda en la Sierra de Alcaraz (Albacete) una comedia, Amanece, que no es poco, sobre un padre y un hijo en un pueblo muy peculiar. Antonio Giménez Rico acaba de comenzar el rodaje de Soldadito español, tragicomedia en clave de humor de un joven llamado a filas.

La Alameda de Osuna, Aranjuez, el Palacio Real de Madrid y el Palacio de las Siete Chimeneas son algunos de los lugares elegidos por Josefina Molina para la acción de Esquilache, producida por José Sámano. La Película tiene un presupuesto que ronda los 250 millones de pesetas, y ha recibido 75 millones del Ministerio de Cultura como adelanto sobre rendimiento de taquilla y 40 millones de TVE por los derechos de emisión.Entre los actores están Fernando Fernán-Gómez, que interpreta a Esquilache; José Luis López (Antonio Campos, secretario del marqués), Ángela Molina (criada de los marqueses), Concha Velasco (marquesa de Esquilache), Adolfo Marsillach (Carlos III), entre otros.

José Luis Cuerda está dirigiendo en Albacete una comedia, Amanece, que no es poco, en la que conjuga elementos intelectuales con gags visuales de tono surrealista. "En mi tercera película he optado por un guión muy libre y personal. Creo que nos hallamos ante un festín de personajes, situaciones y elementos fantásticos de una realidad rural en la que las personas no están mediatizadas por las reglas que imperan en las ciudades".

Producida por CAC y Paraíso Films, este proyecto tiene un presupuesto de 170 millones y cuenta con la participación de 80 actores, uno de los repartos más extensos del cine español, entre los que podemos están Antonio Resines, Luis Ciges, José Sazatornil, Cassen, Pastora Vega, Chus Lampreave, Ovidi Montllor, Rafael Alonso y Aurora Bautista.

Antonio Giménez-Rico decidió volver a la clave de su primera película, El hueso, y hacer una tragicomedia para narrar en clave de humor la historia de Luis, un joven muchacho que se siente libre, vive como le parece y al que de repente la llamada a filas para cumplir el servicio militar le significará un choque del que le resultará dificil librarse: "La idea original surgió después de una reunión con mi promoción de milicia universitaria. Se lo comenté a Rafael Azcona y nos pusimos a trabajar en el guión durante casi seis meses".

Pasodoble

El popular pasodoble del maestro Guerrero Soldadito español es el título de esta comedia llena de humor, a veces ácido o patético y siempre irónico y satírico para provocar la sonrisa del espectador. "Las situaciones siempre son tratadas desde un punto de vista humorístico, con un tono intrascendente, sin ánimos doctrinarios", añade el director.Con un presupuesto de 150 millones y producida por Penélope, el filme cuenta con actores como Maribel Verdú, José Luis López Vázquez, María Garralón, Marisa Porcel, Juan Luis Galiardo, Luis Escobar, Amparo Baró y Miguel Rellán.

Por su parte, Antonio Mercero ultima en estos días el rodaje de El tesoro, adaptación de una obra de Miguel Delibes, informa desde Zamora José Lera. El rodaje se inició el pasado 13 de junio y finalizará en los próximos días, después de haber rodado ya las escenas en las que aparecen las auténticas joyas del tesoro de Arrabalde (Zamora) y para lo que el equipo de filmación dejó momentáneamente el escenario del pueblo segoviano de Madriguera. Antonio Mercero confía en que el film esté listo para ser presentado a finales del próximo octubre en la Seminci de Valladolid.

El argumento gira en torno a un drama rural que se inicia con la presencia de un grupo de arqueólogos en un pequeño pueblo a partir de lo cual se desatan actitudes hostiles entre los lugareños hasta degenar en un final violento.