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EL FUTURO DEL COMUNISMO

El osado orador de Komi que pidió la cabeza de Gromiko

Pilar Bonet

Vladimir Melnikov, jefe del Partido en la República Autónoma de Komi (al norte de Siberia), se reveló ayer como uno de los más osados participantes en la Conferencia, al pedir el cese de Andrei Gromiko, presidente del Presidium del Soviet Supremo de la URSS; del miembro del Politburó, Mijail Solomentzev; del director del periódico Pravda, Víctor Afanasiev; y del jefe del Instituto de Estados Unidos y Canadá, Georgui Arbatov."Quien en el pasado realizó activamente una política de estancamiento, ahora, en la época de la perestroika no puede seguir estando y trabajando en los órganos centrales del Partido y los Soviets", dijo Melnikov.

El orador fue interrumpido por Mijail Gorbachov, que le preguntó a quien se refería. "Me refiero a los camaradas Solomentzev, en primer lugar, a los camaradas Gromiko, Afanasiev, Arbatov...". El ambiente era agitado. En algunos ángulos de la sala sonaron aplausos, según dijo ayer Yun Skliarin. La osadía, sin embargo, no quedó sin respuesta. Una nota llegada de la sala defendió a Gromiko como una persona "respetable" que había soportado grandes cargas de trabajo en el Partido y en el Estado y pidió que no se "ofendiera" a personas "respetables".

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El jefe de la delegación de Komi, una tierra donde el Estado soviético envía a presidarios y desterrados, pidió que los "delincuentes y los alcohólicos" cumplan condenas donde cometieron sus delitos y no sean enviados a su territorio, que calificó de "abandonado".

Entre otras cosas, Vladimir Melnikov se quejó del Gossakas (Pedido del Estado, o Plan) que obliga a las empresas de su territorio a entregar al Estado todo el carbón que producen, y criticó la fórmula "estado de salud" cuando ésta encubre las faltas cometidas por un dirigente que obligan a jubilarlo. Melnikov es partidario de que los cuadros del Partido actuen como "comisarios" de la perestroika.

Ivan Laptiev, director del periódico gubernamental Izvestia, fue acogido con silbidos al proponer la disculpa y la rectificación como método para superar los errores informativos de la prensa.

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Sobre la firma

Pilar Bonet
Es periodista y analista. Durante 34 años fue corresponsal de EL PAÍS en la URSS, Rusia y espacio postsoviético.

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