Interpol tardó cerca de 10 meses en reclamar al 'Nani'

El comisario jefe de Interpol España, Tomás Astilleros Domingo, testificó ayer en la vista oral por la desaparición del Nani que la Brigada Regional de Policía Judicial de Madrid no requirió datos sobre la posible estancia de Santiago Corella en Francia hasta 10 meses después de la supuesta fuga del Nani en Vicálvaro. La Dirección General de la Policía remitió al juez copia de la documentación sobre Corella existente en Interpol, según la cual, la primera petición se hizo en mayo de 1984. Astilleros afirmó ayer que ha verificado "en el expediente [de Santiago Corella] que existe un error", y reiteró que la reclamación data del 11 de septiembre de ese año.

Astilleros agregó que, tras consultar su archivo, no ha encontrado ninguna reclamación relativa al Nani anterior a la de septiembre, que remitió la brigada a través de la Jefatura Superior de Policía de Madrid. El jefe de Interpol España afirmó que este procedimiento de petición "es correcto, aunque no muy frecuente".La petición a Interpol de Paris señala que Corella "podría encontrarse en Francia en estos momentos, aunque se ignora la localización geográfica exacta", aun cuando diferentes agentes hin testificado en el juicio que no se realizaba una solicitud de localización a Interpol si no se tenían datos precisos sobre la estancia de un huido en el extranjero. Astilleros precisó que para reclamar a una persona a otro país hay que tener al menos indicios o sospechas de que se encuentra allí.

A este respecto, el inspector Antonio Caro Fontanillo declaró ayer que "dos o tres meses después" de la supuesta huida de Corella -es decir, en enero o febrero de 1984- recibió una información que hablaba de la presunta estancia del Nani en el sur del país vecino. Según Caro, este dato se lo facilitó el joyero y confidente santanderino Federico Venero, quien dijo que lo sabía por la esposa de Francisco Javier Sánchez Rico, el Pardi, un delincuente amigo de Corella. Las gestiones de Caro respondían a una petición hecha en noviembre de 1983 por el comisario Francisco Javier Fernández Álvarez, uno de los policías ahora procesados, quien le requirió que averiguase datos sobre el Nani a través de Venero.

Pista falsa

El inspector Caro afirmó que entonces no se hizo una reclamación a Interpol Francia ante la falta de datos más precisos.El joyero Venero declaró en su día en la vista oral de la causa que algunos de los procesados le reclamaron que, junto con el Pardi, montase una falsa pista para demostrar que Corella está vivo en Francia.

Interpol Francia no contestó a la solicitud española hasta el 13 de enero de 1986, y señaló en su respuesta que no tenía datos de la presencia del desaparecido en ese país.