Sublevación militar contra Cerezo en Guatemala
, Un sector del Ejército guatemalteco se sublevó ayer con la intención de derrocar al presidente de la República, el democristiano Vinicio Cerezo, que asumió el poder por sufragio universal en enero de 1986, poniendo así fin a 30 años de Gobiernos no democráticos. Las primeras noticias eran confusas, e indicaban que varios edificios públicos, entre ellos la radio nacional, habían sido tomados por los golpistas, que el aeropuerto se encontraba cerrado y que las comunicaciones telefónicas quedaron bloqueadas. Sin embargo, el ministro de Defensa aseguró que el golpe había sido sofocado y que la situación estaba controlada. El Consejo de la Internacional Socialista (IS), reunido en Madrid, condenó la rebelión militar.
Tropas de las zonas militares de Jutiapa y Retalhuleu, en el suroriente y suroccidente del país, respectivamente, marcharon en la madrugada de ayer hacia la capital en un intento de golpe de Estado que fue frustrado, aseguré en la tarde de ayer (anoche, en España) en una conferencia de Prensa el ministro de Defensa, general Héctor Alejandro Gramajo, acompañado por comandantes de varias bases militares de la capital y del resto del país."Personas que no logran ubicarse dentro del régimen democrático lograron incitar finalmente a oficiales", dijo el jefe militar. Dijo también que la sublevación se debió a la "penetración de elementos civiles radicales en el Ejército". Gramajo afirmó que la situación se encontraba bajo control, pero omitió identificar a los cabecillas "por ética y porque la investigación podría determinar que hay más responsables o que alguno de los implicados resulta libre de culpa".
El general Gramajo indicó que dos oficiales habían sido detenidos y que algunos confesaron que "habían sido convencidos por otros de que marchaban a la capital en defensa del régimen" del presidente Cerezo. "El Ejército reitera su apoyo al Gobierno del presidente Vinicio Cerezo y al proceso democrático", concluyó el ministro de Defensa.
A primera hora de la mañana de ayer se observó en la capital guatemalteca un movimiento inhabitual de tropas, que hizo despertar entre la población los rumores de un golpe de Estado.
Las primeras noticias hablaban de que los protagonistas del alzamiento procedían de la brigada Guardia de Honor, sede del batallón blindado de la zona militar central, y del grupo táctico de la fuerza aérea guatemalteca, que tienen respectivamente 4.500 y 2.000 efectivos.
Sin embargo, el ministro de Defensa desmintió ese extremo y afirmó que esas unidades, al igual que otra brigada, cercaron la ciudad para impedir el paso de los rebeldes. Otras noticias indicaban que los sublevados eran 9.000 hombres.
Otros contingentes salieron al encuentro de los que marchaban contra la capital, pero se evitó todo enfrentamiento. "Afortunadamente estas acciones fueron inmediatamente neutralizadas y los oficiales involucrados depusieron su actitud, algunos incluso manifiestando que fueron engañados", afirmó Gramajo.
Las carreteras hacia el occidente, en dirección a México, y las del sur y sudeste, que conectan con El Salvador y Honduras, respectivamente, fueron en un principio bloqueadas por las tropas sublevadas. A última hora de ayer había informaciones contradictorias sobre la ocupación de varios edificios públicos, entre ellos las instalaciones de la radio nacional, y del cierre del aeropuerto internacional de Ciudad de Guatemala. Las comunicaciones telefónicas estaban prácticamente interrumpidas.
El pasado lunes, un diario de la capital publicó un manifiesto firmado por los "comandantes de la montaña", que se presentaban como oficiales del Ejército combatientes de la guerrilla y que criticaba duramente al presidente Cerezo y al ministro de Defensa.
