Crisis en el Gabinete de Bonn tras el auge socialdemócrata en Schleswig-Holstein
La gran victoria del Partido Socialdemócrata Aleman (SPD) en las elecciones del domingo en el Estado de Scheswig-Holstein, donde tras 38 años de gobierno de la Unión Cristiana Democrática (CDU) se impuso con más del 54,8% de los votos, supone un nuevo y duro revés para la política del canciller federal Helmat Kohl. Este resultado fomenta ya el incremento de los enfrentamientos en el seno de la coalición gubernamental federal entre CDU, la unión bávara CSU y los liberales del FDP.
El presidente bávaro Franz Josef Strauss, que de forma cada vez más abierta pone en duda la capacidad de líderazgo de Kohl, ya se declaró el domingo contrario a los intentos del canciller federal y sus colaboradores de basar su derrota únicamente en la reacción del electorado al escándalo en torno a la persona del entonces jefe de Gobierno democristiano Uwe Barschel.El secretario general de la CDU, Heiner Geissler, negó que el resultado de SclíleswigHolstein sea parte de una tendencia electoral en toda la RFA. Con el resultado del domingo, la CDU pierde la mayoría en el Consejo federal (Bundesrat), la segunda Cá mara parlamentaria, y necesitará para su política legislati va la voz de la CSU de Baviera.
Strauss, líder incontestado de la CSU, pero también otros dirigentes de la CDU se muestran reacios a seguir la política de Bonn en lo que respecta a la reforma fiscal y la reforma sanitaria, dos de los grandes objetivos de Kohl para esta legislatura.
Uwe Barschel había utilizado el aparato de la presidencia para organizar una campaña de despretigio contra su rival socialdemócrata, utilizando todo tipo de métodos maflosos y criminales. Tras revelarse el escándalo, Barschel se vio obligado a dimitir y poco después aparecía muerto en un hotel en Ginebra donde, según revelé la investigación judicial, se había suicidado.
Bjorn Engolin, el líder socialdemócrata, logró un incremento de, más del 9% frente a las elecciones de 1983 y se hizo con 46 de los 74 escaños del parlamento de Kiel.
Aunque gran parte del hundimiento de la CDU se deba sin duda al grave desprestigio de todo el aparato cristianodernócrata en ese Estado a causa de las maniobras de Barschel.
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