Seriedad y rigor

Graham Parker es el heredero directo de los grupos de pop británico que tuvieron su época de máximo esplendor en el ecuador de la década de los sesenta. Tras la desaparición de estos grupos a principios de los setenta, nadie ha continuado por este camino con la lucidez del británico Graham Parker. Su música posee elegancia, clase, madurez, frescura y un indiscutible peso específico.Esa capacidad de transmitir "por derecho", como dicen los flamencos, es lo que siempre ha tenido un Graham Parker que arrastra siempre tras sí aficionados entendidos dispuestos a saborear una música planteada con seriedad y rigor. El británico, además, sabe acompañarse por magníficos y veteranos músicos, que no alardean de sus posibilidades, pero demuestran que en la música de Graham Parker cada nota tiene su porqué.

Todos ofrecieron un concierto importante, que tuvo el aliciente añadido de significar la reapertura de la sala Universal, un auditorio que se ha convertido en clásico y es imprescindible para normalizar el desarrollo de la música en Madrid.