Los piquetes llenan de basura las calles en el primer día de huelga de limpieza viaria

Las principales calles de Madrid mostraban en las primeras horas de ayer el aspecto de un vertedero a causa de la actuación nocturna de piquetes, coincidiendo con el inicio de la huelga indefinida de los 1.700 trabajadores de las empresas concesionarias de la limpieza viaria. La policía detuvo a siete trabajadores, que fueron puestos en libertad tras pasar por comisaría. A mediodía, 400 trabajadores se concentraron en la plaza de la Villa para pedir la mediación municipal. La recogida domiciliaria de basura no está afectada por la huelga.

La actuación de los piquetes consistió en el derribo durante la noche de papeleras e incluso cubos de basura cuyo contenido fue esparcido por las calles. Tampoco pudieron cumplirse los servicios mínimos impuestos por la Delegación del Gobierno en Madrid pues, según los trabajadores, el cumplimiento -fijado en el 25% de un día normal- fue inferior como consecuencia de haber aparecido algunos parques con sus cerraduras selladas. Las calles y pistas del aeropuerto de Barajas tampoco fueron limpiadas, al no haberse fijado ningún porcentaje de servicios mínimos.Jorge Tinas, concejal de Medio Ambiente, anunció que el Ayuntamiento, en cumplimiento de las condiciones fijadas a las empresas limpiadoras, procederá a aplicarles las sanciones previstas.

Pasadas las 11.30 horas, unos 400 trabajadores ocuparon la plaza de la Villa y procedieron a tirar montones de pequeños papeles que extraían de bolsas de plástico al tiempo que pedían una entrevista con el alcalde, Juan Barranco. La nevada cubrió la plaza mientras la Policía Municipal, de guardia en el Ayuntamiento, cerraba las verjas de entrada.

Hacia las 14.15, el alcalde, Juan Barranco, que se dirigía a recibir, en nombre del Ayuntamiento, la medalla de oro de la Cámara de Comercio, ordenó abrir la verja y salió a la plaza, donde los trabajadores comenzaron a gritar: "Barranco, escucha, Limpieza está en la lucha".

Allí, y rodeado de policías municipales y trabajadores, el alcalde inició una conversación con algunos de los representantes, a quienes explicó que el Ayuntamiento sólo podía mediar, pero no negociar, al pertenecer los trabajadores a la plantilla de Construcciones y Contratas, Cespa, Alfonso Benítez, Semat y Cles de Mantenimiento, empresas contratadas por el Ayuntamiento.

Los trabajadores piden un aumento salarial del 7,4% -frente a un 4% que ofrece la patronal-, la libranza de 22 sábados al año para reducir a 38 horas la jornada semanal, que es de 42 horas, y el cobro del 100% del sueldo por enfermedad desde el primer día. La reunión de la mesa negociadora que estaba prevista para la tarde de ayer se pospuso para hoy con el fin de intentar desbloquear la negociación.