España acoge a iraníes antijomeinistas, expulsados por Francia como gesto por la colaboración contra ETA

España acogió ayer a cinco iranies antijomeinistas pertenecientes a la organización armada Muyahidin del Pueblo y a tres turcos kurdos que Francia había expulsado en diciembre pasado a Gabón por el procedimiento de urgencia. España, acogió a los expulsados por Francia como gesto de colaboración tras el apoyo en la lucha antiterrorista prestado por el Gabinete de Chirac, según fuentes gubernamentales. Fuentes del Ministerio del Interior aseguraron que la estancia en España de los expulsados por las autoridades francesas a Gabón se decidió por "razones humanitarias" y tiene un "carácter provisional".

Por su parte, el presidente del Gobierno, Felipe González, calificó ayer en París la acogida española los iraníes como "un gesto lógico entre dos países que mantienen una amplia cooperación". "Ello no afectará a las buenas relaciones que existen con Irán. Este país no tiene por qué interpretar esta medida contra él", añadió González.Un avión militar francés trasladó desde Libreville a Madrid a los ocho expulsados por Francia a Gabán, que llegaron al aeropuerto de Barajas alrededor de las 19 horas. En el mismo aparato viajaban otros siete iraníes pertenecientes a la misma organización armada antijomenista y dos avalistas o responsables políticos del grupo, que pretendieron desembarcar en Madrid para ponerse en contacto con organizaciones españolas y difundir los objetivos de los muyahidin.

Las autoridades españolas prohibieron a los dos responsables políticos del grupo armado entrar en España, y siguieron viaje a París junto a los otros siete miembros del grupo que embarcaron en Libreville, capital gabonesa. Los cinco iraníes que fueron acogidos en nuestro país son Yazdan Hadg Hamzeh, Momen Tchupani, Youssusu Habibi Kalahroudi, Bahan Ghaderi Tezangi y Asshat Dhegani. Los turcos kurdos son Kaya Ordemiz Ali, Kenan Ungam Ismail y Aci Kokoglu.ç

Acciones en Berlín

Entre los tres turcos se encuentran el vicepresidente de los Trabajadores Patrióticos del Kurdistán y el presidente del Movimiento Revolucionario Internacionalista. Según fuentes policiales, los turcos acogidos por España ocuparon el pasado 5 de agosto de 1987 las oficinas de una compañía aérea en Berlín.

Todos ellos, a excepción de Bahan Ghaderi, se encontraban en Francia, antes de ser expulsados a Gabón, tramitando su solicitud de refugio en París, por lo que las autoridades españolas han califÍcado su actual situación en España como de "transferencia". A Ghaderi, las autoridades francesas le habían denegado su solicitud de refugio en el vecino país.

En las negociaciones entre el Gobierno francés y los muyahidin, informa desde París Lluís Bassets, se ha acordado que los cinco iraníes refugiados en España no intentarán regresar a Francia, incluso en el caso de que los tribunales administrativos accedan a sus recursos contra las expulsiones.

Los dos países donde podrían ser acogidos son Holanda y Suecia, pero no se descartaba ayer, en medios próximos a los muyahidín, que algunos de ellos decidieran quedarse en España, donde su organización cuenta con representantes oficiosos.

El Gobierno francés ha negado sistemáticamente que las expulsiones se hayan producido en respuesta al chantaje de los jomeinistas libaneses y reitera que se trataba de personas peligrosas para el orden público y la seguridad francesa: El desenlace del conflicto puede tener graves repercusiones en la normalización de relaciones entre Francia e Irán, en el preciso momento en que el Gobierno de Jacques Chirac esperaba conseguir, antes de la elección presidencial, la liberación de los tres rehenes franceses que quedan en Líbano.

La resolución del contencioso se ha producido también gracias a la buena voluntad española, que de forma insólita ha actuado como tierra de asilo respecto a Francia.

Las autoridades españolas estudiarán la documentación de los iraníes y turcos kurdos acogidos y les aplicarán la ley de extranjería.

En fuentes del Ministerio del Interior se afirma que se facilitará su estancia en nuestro país, aunque tiene un "carácter provisional", y también dependerá de las solicitudes que pueden plantear, como su posible refugio en España, de acuerdo con la legislación de nuestro país.

Un microbús recogió al grupo y lo trasladó a un hotel del centro de la capital donde permanecerá temporalmente. Asimismo, la policía inició los trámites para regularizar su situación en España.

Uno de los acogidos por nuestro país sufre algunos problemas de salud a causa de la huelga de hambre que iniciaron miembros de este grupo en París al comenzar las expulsiones hacia Gabán el pasado mes de diciembre. Esta medida del Gobierno francés provocó una dura protesta del jefe de los muyahidin en Bagdad, Masud Radjavi, al presidente de la República Francesa, Frangois Mitterrand, por "el comportamiento escandaloso y deshonroso" contra los derechos de estos refugiados. Anoche, la Embajada de Irán en Madrid no había comunicado ningún planteamiento a las autoridades españolas sobre el caso.