_
_
_
_
CITA EN WASHINGTON

Thatcher pedirá a Gorbachov que pacte con Reagan un calendario para la 'guerra de las galaxias'

La primera ministra británica, Margaret Thatcher, pedirá hoy al líder soviético, Mijail Gorbachov, que haga lo posible por pactar con el presidente norteamericano, Ronald Reagan, un calendario de investigación y desarrollo de la Iniciativa de Defensa Estratégica (SDI). Este acuerdo permitiría a ambas superpotencias crear una atmósfera de confianza mutua encaminada a lograr nuevos objetivos de control de armamentos, según fuentes gubernamentales británicas. Thatcher y Gorbachov se entrevistarán esta mañana durante dos horas en Brize Norton, una base militar cercana a Londres.

Más información
El acuerdo sobre euromisiles, un error al cuadrado

Thatcher adelantó hace días en una carta dirigida a Reagan el núcleo de su conversación con el dirigente soviético, al tiempo que le pidió que se mostrase flexible en sus planes sobre la guerra de las galaxias, de acuerdo con las informaciones filtradas en la capital británica por fuentes gubernamentales y que ayer coincidían en publicar The Sunday Times, The Sunday Telegraph y The Observer.Thatcher " piensa manifestar a Gorbachov lo que ya ha indicado a Reagan: que ambos deben ponerse de acuerdo sobre un calendario y sobre las fórmulas de desarrollo de la investigación de la SDI en el marco de tratado ABM de 1972 de limitación de sistemas de defensa contra misiles balísticos. El respeto de este acuerdo por parte de Washington y Moscú contribuiría a disipar la desconfianza mutua y a facilitar la wnsecución de otros acuerdos, en primer lugar sobre misiles estratégicos, pero también sobre armas químicas y sobre la reducción de fuerzas convencionales en Europa.

Verificación

Eli logro de este compromiso debe enraizarse, según Londres, en los términos de verificación contemplados en el tratado sobre fuerzas nucleares de alcance intermedio (INF), que mañana firmarán Reagan y Gorbachov firmarán en Washington en Washington y que deben servir de ejemplo. Para Thatcher, que los soviéticos hayan accedido a una minuciosa verificación y a una reducci6n asimétrica de fuerzas es uno de los grandes logros del tratado sobre las INF que sienta valiosos precedentes.La carta de la primera ministra felicita a Reagan por el éxito logrado, fruto de la "constancia mantenida durante seis años", y no puede dejar de haber sido recibida en Washington como un bálsamo después de los ataques infligidos a la Casa Blanca desde la filas republicanas ultraconservadoras, que tienen a Thatcher en muy alta estima.

Durante las dos horas que Thatcher y Gorbachov van a compartir en la base aérea de Brize Norton, la primera ministra, además de bucear en el pos-INF, ofrecerá a su huésped el último minuto de la visión europea sobre el futuro del control de los armamentos y de las relaciones Este-Oeste, pues está recién llegada de la cumbre comunitaria de Copenhague.

Thatcher opina de que no debe haber más reducciones de fuerzas nucleares en Europa hasta que no se logren acuerdos sobre armas químicas y fuerzas convencionales. Su aportación a esta cumbre de las superpotencias será la que ofrece la tierra en la que se han librado dos guerras mundiales, una visión que no puede dar Reagan.

El encuentro de Brize Norton es una extraordinaria concesión de Gorbachov a Thatcher, dos personalidades tan fuertes como ideológicamente separadas, y que se llevan muy bien. Según el portavoz soviético Guenadi Gerasimov, "Thatcher tiene sólidos puntos de vista y el secretario general quiere oír su opinión sobre el control de armamentos".

Gorbachov hizo su primera aparición en Occidente durante una visita al Reino Unido en diciembre de 1984, cuando sólo era secretario general in péctore. En aquel encuentro quedó acunado el juicio de Thatcher según el cual Gorbachov "es un hombre con el que se puede tratar". En la pasada primavera, Thatcher y el número uno soviético dialogaron 13 horas en Moscú y, hace 10 días, la primera ministra manifestó en la Cámara de los Comunes su "firme apoyo a los audaces y valientes cambios que se están realizando en la URSS".

Ésta es la segunda visita que un líder del Kremlin realiza a Londres. Hay que remontarse 31 años para recordar la que en 1956 efectuara el entonces secretario del Partido Comunista de la URSS, Nikita Jruschov. Aquella estancia duró 10 días y Thatcher va a reiterar hoy a Gorbachov su invitación para que vuelva al Reino Unido con más tiempo.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_