Gilovanni Negri promueve en España la creación de un partido transnacional
"No nos interesa presentarnos a las elecciones ni abrir sedes; lo que queremos es promover campañas civiles por esos temas que nunca tratan los demás partidos pero que forman parte del sentir de la mayoría, y superar los límites nacionales para crear los Estados Unidos de Europa". Así define Giovanni Negri, secretario general del Partido Radical (PR) italiano, la estrategia de su grupo ante su próxima transformación en un partido transnacional. Un proyecto que presenta en España, adonde Negri ha venido en busca de apoyo.
Para Negri, de 30 años, secretario general de su partido desde 1984, la construcción de los Estados Unidos de Europa es la única garantía para salvaguar dar la democracia y contrarrestar la amenaza que supone el que "las decisiones que condicionan nuestras existencias es capen cada vez más a los círculos políticos". En su opinión, la única forma de "salvar a los pueblos europeos de la decadencia" es dar una función constituyente al Parlamento Europeo. Este punto será el objeto de una campaña por parte de su grupo con vistas a un eventual referéndum europeo en 1989.¿Utopía? "Puede", contesta Negri, "pero también lo era hace unos años el dar en Italia la batalla por el divorcio, la justicia o el abandono de la energía nuclear, y, sin embargo, ahí están los resultados de los últimos referendos, con un, 80% de votos favorables".
La creación de un partido transnacional se concretará en el próximo congreso del Partido Radical, que se celebrará en Italia entre los próximos 2 y 6 de enero. Ello supondrá una refundación del partido que Negri califica de "salto cualitativo".
Mientras, el joven dirigente y sus compañeros realizan una campaña informativa por las capitales europeas para lograr adeptos para la nueva criatura. Su bautismo de fuego será hoy, con la celebración de manifestaciones simultáneas ante las embajadas estadounidense y soviética en las capitales europeas, incluida Madrid, para pedir la liberación de Paola Cooper -menor de edad cuya condena a muerte está pendiente en EE UU- y la defensa de los derechos humanos en la URSS.
Computadora y teléfono
"Queremos evitar convertirnos en un elefante pesado, en el que la maquinaria burocrática impida, como en los partidos tradicionales, conectar con las aspiraciones de la mayoría", afirma Negri. Su ideal es un "partido de computadora y teléfono", con facilidad de respuesta, cuyo peso recae sobre el apoyo de personalidades -entre las que figuran numerosos premios Nobel- y acciones concretas de grupos en el marco de la no violencia.Su ejemplo son las asociaciones fabianas británicas de principio de siglo: su objetivo no es alcanzar el poder, sino influir en la clase dirigente para que haya un cambio de política en los países.
El desafío de los radicales va dirigido también a las tradicionales nacionales de los diversos países. "La política", afirma Negri, "debe adaptarse a la esencia supranacional de la realidad en la que vivimos", afirma. El partido transnacional, afirma Negri, sin sacrificar los problemas específicos de cada nacionalidad, debe asumir el carácter supranacional de los problemas que nos afectan.
En España, el partido transnacional radical tiene previsto promover campañas civiles como las que se han dado en Italia sobre el tema del aborto, la energía nuclear, la muerte por hambre de 40 millones de personas en el mundo cada año...
Negri sonríe cuando se llega a la inevitable pregunta sobre su compañera de partido, la diputada y acriz porno Ilona Staller, Cicciolina. "No entiendo por qué acapara tanto la atención, puesto que tampoco es tan guapa ni inteligente como dicen", comenta.
Sin embargo, admite que Cicciolina constituye un fenómeno sociológico "muy interesante" en cuanto fruto del descrédito de la clase dirigente italiana.
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