Las obras de 534 viviendas sociales, paradas por vecinos de Carabanchel

Un grupo numeroso de vecinos de Carabanchel Bajo impidió el lunes el trabajo en la obra del Alto de San Isidro, donde está prevista la construcción de 534 viviendas de promoción pública. La actitud de los vecinos, que llevan meses de oposición a las obras, se basa en que el Instituto de la Vivienda de Madrid (Ivima) ha modificado profundamente el proyecto original, rebajando calidades de construcción, obras y terrenos de urbanización de la colonia.

La asociación vecinal de Carabanchel Bajo denuncia asimismo que tales modificaciones se hicieron de espaldas a los vecinos. La Administración despidió previamente a los arquitectos que representaban a la asociación en la redacción del proyecto y realización de las obras.

El inicio de las 534 viviendas fue en 1985, y los trabajos quedaron paralizados en 1986, por quiebra de la cooperativa encargada de las obras. "La Administración", denuncia la asociación, "aprovechó la paralización de las obras para modificar el proyecto, en perjuicio de los vecinos". Tampoco está claro, a la vista de los problemas de financiación de la Comunidad de Madrid en materia (le construcción de viviendas, que estén asegurados los fondos necesarios para garantizar la terminación de las 534 del Alto de San Isidro.