El jefe de los guardias civiles que intervinieron en Reinosa comparece ante el juez

Pablo Monje Minguillón, el teniente coronel de la Guardia Civil que mandaba las fuerzas antidisturbios durante la Semana Santa en Reinosa, días en que se produjeron violentos enfrentamientos con los trabajadores de la comarca, compareció ayer ante Mauricio Bugidos, el juez que instruye el sumarlo abierto por el caso Reinosa.

Pablo Monje, vestido de paisano y acompañado de su abogado defensor, entró en la sede del juzgado a las cinco de la tarde, justamente la hora señalada por el magistrado.Asimismo, durante la mañana, a lo largo de más de cuatro horas, había sido interrogado el capitán Álvaro Gutiérrez.

Este capitán ejercía el mando de la compañía que se desplegó el pasado Jueves Santo, 16 de abril, por calles y plazas de la localidad cántabra.

A lo largo del miércoles, el juez Mauricio Bugidos había recibido también en su despacho a varios miembros de las fuerzas antidisturbios que en aquella jornada intervinieron con su tanqueta en el acoso a los trabajadores, en el pueblo de Matamorosa.

Entre los trabajadores se encontraba Gonzalo Ruiz, quien moriría tres semanas más tarde en el hospital Marqués de Valdecia.

El trabajador resultó herido después de haberse refugiado en el garaje de su casa tras sufrir fractura de huesos de la nariz. En el interior del habitáculo inhaló gases tóxicos disparados por las fuerzas antidisturbios, que le ocasionaron la destrucción de los pulmones y, posteriormente, la muerte.

El juez instructor había tomado ya declaración, el 3 de julio, a otros cinco guardias de segunda adscritos a la 509ª Comandancia Móvil de la Guardia Civil, con base en Logroño, que también participaron en los sucesos de Matamorosa.

Traslado del juez

Mauricio Bugidos ha sido designado en estos días juez de primera instancia e instrucción de Carrión de los Condes (Palencia), pero por razones del servicio permanecerá un mes todavía en Reinosa.Presumiblemente, se pretende antes de su marcha avanzar en el sumario y practicar las últimas y más importantes diligencias. Se da por seguro que en el curso de este mes comparecerán en el juzgado, de Reinosa los patólogos de Santander, Madrid y Zaragoza que en su día intervinieron en el análisis de las vísceras de Gonzillo Ruiz, y cuyos resultados suscitaron una polémica.

Mientras María Castellanos, catedrática de Medicina Legal de Zaragoza, observadora en representación de la Guardia Civil en la disección de los restos llevada a cabo en el centro Marqués de Valdecilla, declaró haber hallado un tumor maligno en un riñón del obrero muerto, los patólogos de Valdecilla precisaron que su carácter era benigno. Por su parte, el Instituto de Toxicología de Madrid creyó haber encontrado un segundo tumor, lo que fue negado por Valdecilla.

El sumario del caso Reinosa acumula ya más de 4.000 folios; 400 vecinos de Reinosa formularon, a raíz de los más graves sucesos, sendas denuncias por los daños o malos tratos de que, presuntamente, fueron objeto por la Guardia Civil.