El Banco de Santander colocará en el mercado suizo cerca de un millón de acciones

El Banco de Santander llevará a cabo la colocación de una cantidad próxima al millón de acciones en el mercado suizo. Esta venta, que se efectuará a mediados del próximo mes de octubre, será la cuarta de gran envergadura que realiza el banco durante el presente año, y con ella habrán cambiado de manos cerca de 7,5 millones de acciones de los 94,6 millones de que está compuesto el capital de la sociedad, que asciende a 47.300 millones de pesetas.

La cuantía inicial de la operación estaba fijada en 1.200.000 acciones, que al final parece se quedará en el citado millón, aunque otras fuentes también creen posible que se reduzca algo. En esta colocación de acciones, correspondientes a la autocartera del banco, actuarán como agentes los tres principales bancos suizos: Unión de Bancos Suizos, Crédit Suisse y la Société de Banque Suisse, mientras que el Banco Exterior de España Suiza actuará como co-manager de la colocación. El próximo día 14 de octubre tendrá lugar una presentación pública de la operación en Zúrich, que se repetirá al día siguiente en Ginebra. Tras la citada presentación, los bancos aseguradores comienzan a trabajar con las entidades afines para el reparto de las distintas cuotas. El Banco de Santander estaba interesado en que el citado millón de acciones cotizaran en la Bolsa de Zúrich, asunto para el que parece existir alguna dificultad legal aún no resuelta.Con esta venta al exterior, la participación de accionistas extranjeros en el capital del Banco de Santander se acercará al 9%. La estrategia que suele preside estas colocaciones es la de lograr una adecuada difusión del accionariado que haga más difícil la entrada de potenciales inversores en busca de paquetes de control. Fuentes cercanas al Banco de Santander señalaron que las acciones proceden del fondo de autocartera de la sociedad y no de accionistas individuales.

Mantener el control político

En el caso del Santander, la idea de esta operación es la misma que presidió la colocación, el pasado mes de julio, de 3,7 millones de acciones en Nueva York y en Londres: diversificar la inversión institucional al máximo y no ceder más que los derechos económicos. La fórmula consiste en vender los depósitos de las acciones, manteniendo controlados sus derechos políticos.La operación del Santander es la cuarta de este tipo que se realiza desde que Emilio Botín sustituyó a su padre en la presidencia del sexto banco privado nacional. Antes de la citada de julio, el banco procedió en febrero a la venta de un millón de acciones en el mercado de Londres, coincidiendo en el tiempo con la operación de canje de acciones del Banco Comercial Español por títulos del Santander, en la proporción de tres a una.