Cavaco Silva desea reducir el papel del Estado en la economía portuguesa

La reducción del papel del Estado en la economía y el fomento de la iniciativa privada en todos los aspectos de la vida nacional son las principales orientaciones que el nuevo Gobierno portugués quiere seguir en los próximos cuatro años. El primer ministro, Aníbal Cavaco Silva, dedicó a la reorganización del sector público la mayor parte de su intervención, el miércoles, en el Parlamento para presentar el programa del Gobierno salido de las elecciones del 19 de julio. A pesar de la oposición de socialistas y comunistas, que acusan a Cavaco Silva de subversión del orden constitucional vigente en Portugal desde 1976, el programa del Gobierno será aprobado hoy, viernes, con el apoyo de los diputados socialdemócratas, que disponen de una confortable mayoría absoluta en la Cámara única del Parlamento portugués.

Calificado por algunos observadores de "manifiesto liberal", el proyecto de Cavaco Silva establece, sin embargo, límites políticos claros a la reprivatización de la economía portuguesa, exigida hace años por los sectores más conservadores del patronato y de la derecha política.

Cavaco Silva dijo que "el universo de las empresas exclusivamente públicas debe limitarse al conjunto de empresas que prestan servicios públicos" y a algunos sectores considerados de interés estratégico para el país. La reprivatización total o parcial de las demás deberá, según el primer ministro portugués, realizarse progresivamente y en diálogo con los trabajadores interesados. Esta política permitirá al Estado disponer de medios financieros para modernizar el sector público y la Administración, liquidar la deuda pública correspondiente a las nacionalizaciones de 1975 y, sobre todo, realizar inversiones en infraestructuras y programas sociales en el campo de la enseñanza, de la formación profesional, de la salud pública y de la juventud. Entre las medidas concretas que el líder socialdemócrata se propone implantar, Cavaco Silva citó la reprivatización de todos los medios de comunicación del Estado, con excepción de "un servicio público mínimo de radio y televisión".

Comunidad lusa

En materia de política exterior -otro sector que mereció especial atención del primer ministro portugués-, la única novedad consiste en la enérgica reafirmación de la voluntad del Gobierno de Lisboa de estrechar y mejorar las relaciones con los países africanos de lengua portuguesa. Los partidos de la oposición de izquierda han criticado severamente el programa del segundo Gobierno Cavaco Silva. Para los socialistas, el líder socialdemócrata conquistó la mayoría absoluta con promesas de continuar la política de su mandato anterior, pero ahora revela sus verdaderas intenciones con un "programa de ruptura". Los comunistas hablan de "terremoto anticonstitucional", que amenazaría los aspectos fundamentales del sistema democrático portugués con la revisión de la legislación laboral y electoral.