Un grupo del Senado investigó si Casey había fallecido por causas naturales

Miembros de dos comités del Senado de Estados Unidos controlaron los datos médicos de William Casey, el director de la Agencia Central de Inteligencia (CIA) fallecido el pasado 6 de mayo, para asegurarse de que estaba muriéndose de cáncer, según informó ayer el semanario norteamericano US News & World Report.

El semanario, que cita fuentes del Congreso, señala que los senadores temían ser engañados y querían estar seguros de que Casey, un personaje clave en el escándalo del Irangate, se estaba verdaderamente muriendo de causas naturales. Los senadores revisaron los análisis sanguíneos y otros datos médicos de William Casey después de que éste fuera ingresado en un hospital de Nueva York en mayo.

Tras la muerte, el 6 de mayo, del director de la CIA, el Comité de Inteligencia del Senado obtuvo la información sobre la autopsia que se realizó al cadáver.

Toda esta información confirmó que Casey murió de cáncer, afirma US News & World Report. William Casey ya había sido operado en diciembre pasado de un tumor cerebral maligno.

El actual director de la CIA, William Webster, declaraba ayer en el diario World's Herald que no piensa destituir a ningún responsable de sus servicios a raíz del Irangate.