La policía de Suecia pide que el SIDA sea considerado como una enfermedad laboral
La policía sueca ha pedido al Departamento de Asuntos Sociales de su país que el síndrome de inmunodericiencia adquirida (SIDA) sea considerado como una enfermedad laboral. La Dirección General de la Policía hizo esta solicitud con la intención de proteger a los agentes que puedan resultar "contagiados en el curso" de su trabajo, para lo que resulta necesario que estén "cubiertos por el seguro" que se aplica a los accidentes laborales de cualquier tipo.
La policía ha solicitado también que se pueda someter obligatoriamente a los sospechosos de portar el virus a una prueba que permita confirmarlo, pero las autoridades sanitarias "han rechazado ya esta petición", por ser contraria a los derechos individuales reconocidos.Esta medida "destruirá el derecho a protección" de los grupos de riesgo del SIDA, especialmente de los drogadictos, dijo Aake Setraeus, jefe de sección del Departamento de Asuntos Sociales.
Por su parte, el inspector Leif Hessler afirmó que los agentes que tratan diariamente con drogadictos "se sienten víctimas de la arbitrariedad" de esta situación, al no saber quién está contagiado, y se arriesgan a que los detenidos "puedan mostrarse violentos", escupirles e incluso "herirse para salpicarles" con su sangre.
Ahora se sabe que los fluidos del cuerpo también "pueden producir contagio" del síndrome, y algunos detenidos "utilizan este hecho contra nosotros", añadió Hessler, que afirmó que la policía carece en realidad de otra "protección" que no sean los "guantes de goma y casco" con visera.
El temor de los policías "se generaliza" porque llevan muchos años "deteniendo a drogadictos". Tienen miedo a ser contaminados con su sangre y a resultar pinchados con agujas infectadas. "No se puede descartar", ha dicho Hessler, "que quizá algunos ya estemos contagiados".
Muertos
Desde que se conoce el SIDA, 40 personas han muerto en Suecia a causa de esta enfermedad, que anula las defensas naturales del cuerpo, y en enero de este año el número de portadores del virus, según datos de la Dirección General de la Salud, superaba el millar.Los suecos no han variado sustancialmente sus costumbres sexuales, son pesimistas en cuanto a que la expansión de la enfermedad del SIDA en el país pueda detenerse, piensan que afectará tanto a los homosexuales como a los heterosexuales, y cada uno piensa que él no se va a contagiar. Tales son las conclusiones de una investigación efectuada conjuntamente por la Institución de Medicina Social de la universidad de Upsala y el Consejo de Investigación de la provincia de Dalarna, presentadas en un congreso de medicina social.
Un 68% de los encuestados en el estudio considera que leyes más severas no impedirán la expansión de la enfermedad, pero una gran mayoría piensa que los jóvenes que van a hacer el servicio militar deben ser sometidos a una investigación médica y que deben crearse instituciones especiales para albergar a los enfermos de SIDA.
La frecuencia en el cambio de pareja no parece haber disminuido, según la encuesta, y casi todos consideran que el condón es la mejor forma de evitar el contagio.
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