La familia de Andrés Gutiérrez, angustiada ante el silencio de los secuestradores

La familia del industrial Andrés Gutiérrez, secuestrado por la organización terrorista ETA Militar en Getxo (Vizcaya), se encuentra angustiada por la falta de noticias, según ha declarado su portavoz, el abogado Carlos Bracho. La familia va a volver a considerar la posibilidad de tomar algún tipo de iniciativa para acelerar el desenlace del secuestro, que ayer cumplió 45 días.

"Tenemos que ver si con eso conseguimos la vuelta cuanto antes de Andrés", manifestó Bracho, "porque pensábamos que había un precedente de larga espera en el caso de la anterior víctima de un secuestro, Jaime Caballero, pero ya ha pasado más tiempo del normal". El portavoz, que calificó la situación de incomprensible, recordó que en varias ocasiones se ha dirigido públicamente a ETA para pedirle pruebas del estado físico del rehén, sin haber conseguido resultado hasta el momento.

Bracho comentó también la situación de la empresa Lamincer, SA, que Gutiérrez estaba poniendo en marcha cuando fue tomado como rehén en su domicilio del barrio de Neguri. La empresa, radicada en Munguía, dispone de cinco personas contratadas y tenía la intención de ampliar la plantilla hasta medio centenar. Como consecuencia de la ausencia de Gutiérrez, se encuentra paralizada.

Los trabajadores de la factoría han condenado en varias ocasiones el secuestro y han destacado la disposición de Gutiérrez para crear puestos de trabajo en una zona fuertemente castigada por la crisis y el cierre de empresas.