Incidentes menores

Varias decenas de manifestantes del Partido Radical italiano y del Movimiento Federalista Europeo protagonizaron ayer los únicos incidentes en torno a la cumbre europea. Incidentes menores y con un tono folklórico y festivo que acabaron por poner nerviosos a los servicios de seguridad de los doce jefes de Gobierno que iban llegando al edificio Carlomagno.El promotor de la protesta federalista era el eurodiputado italiano Marco Pannella, copresidente del PR y uno de los más abiertos defensores de la unidad europea. Sus seguidores, enarbolando pancartas y banderas de colores verde y naranja, y cantando Volare trataron de crear una barrera humana que rodeara la llegada del primer coche oficial, "exigiendo" la puesta en EFE marcha de un referéndum consultivo sobre los Estados Unidos de Europa. La manifestacion "serena, alegre y no violenta", como la definió Pannella, acabó con algunos detenidos, dos o tres heridos de escasa consideración.

Pero los belgas parece que están ya acostumbrados a este. tipo de protestas durante las cumbres o consejos de ministros europeos, y a la de ayer no le dieron ciertamente una atención especial. Las únicas escenas de forcejeo y de contundencia policial se produjeron por iniciativa de los propios servicios de seguridad de .cada mandatario, alguno de los cuales llegó a recibir globos europeos inflados con agua, lanzados por los manifestantes. En la revuelta Pannella fue zarandeado y lanzado al suelo.

Por otra parte, una gran fiesta popular, bautizada European Festivities (Festividades Europeas), se desarrolla en Bruselas al margen de la cumbre, con la que la ciudad celebra dignamente el RFA aniversario de la crea ción de la Comunidad Europea (CE) e intenta también merecer se su fama de capital de Europa. En el parque del Cíncueriteriarío, a tan sólo 300 metros del edificio Carlomagno -donde se reúnen los máximos dirigentes europeos-, tienen lugar, durante cuatro días, manifestaciones culturales, debates, espectáculos y juegos para niños, casi todos relacionados con la construcción europea. Para acceder al recinto ferial, de 35 hectáreas, es necesario disponer de lo que llaman un pasaporte europeo, que se obtiene en la puerta.