_
_
_
_

Asturias y Galicia, a un palmo de acero y cemento

El puente sobre la ría del Eo acortarás la distancia entre ambas comunidades

Asturias y Galicia estarán más cerca cuando este mismo verano quede listo para el paso de tráfico rodado y de peatones el puente de los Santos, 600 metros de acero y cemento sobre la ría del Eo, y que unirá definitivamente las localidades de Ribadeo, en Lugo, y Barres, en el Principado de Asturias.La construcción del puente, que supondrá un ahorro de 25 minutos en el recorrido Oviedo-La Coruña por carretera, fue la última decisión adoptada por el anterior presidente del Gobierno, el centrista Leopoldo Calvo Sotelo, poco tiempo antes de abandonar la Moncloa tras el triunfo socialista del 28 de octubre de 1982. Calvo Sotelo ha sido uno de los defensores de la obra y será uno de sus usuarios más habituales; no en vano posee una casa de verano en Ribadeo, perfectamente visible desde la margen asturiana de la ría. Con la realización del puente queda satisfecha una vieja aspiración de asturianos y gallegos, que se remonta ya al siglo pasado y que, aunque siempre suscitó controversias entre defensores y detractores, contó tradicionalmente con más apoyo que críticas, especialmente en la comarca del Eo y en el entorno de la ría.

La obra, concluida el pasado día 30, no podrá ser utilizada hasta finales de julio o primeros de agosto, a falta de los últimos detalles, y su inauguración modificará, se supone, los hábitos de comportamiento de los ribereños, que a partir de ahora estarán más cerca: los 24,8 kilómetros de carretera accidentada que separan actualmente Vegadeo de Ribadeo se convertirán en sólo 5,8 kilómetros, con un tramo de 600 metros sobre la ría en su embocadura.

A 62 metros bajo el mar

La realización del puente ha requerido 600 kilómetros de cables, 1.819.000 kilos de acero, casi 16.000 metros cúbicos de hormigón y la cimentación de unos pilotes de sustentación de dos metros de diámetro a 62 metros de profundidad bajo el nivel del mar, sobre un lecho marino dificultoso que opuso resistencia a la obra y que, según el ingeniero director de la misma, Ignacio García-Arango, exigió paciencia y reflexión para superar las dificultades técnicas que entrañaba el empeño. "Hasta ahora ningún puente se había cimentado a 62 metros bajo el mas. En muchas ocasiones la cuchara que utilizábamos para extraer la arena se nos desenganchaba a 60 metros de profundidad y para seguir traba ando había que pescarla materialmente con una grúa y un cable de acero".La obra fue adjudicada en 1983 a la empresa constructora Cubiertas y MZOV, SA, con un presupuesto inicial de 822 millones, que aumentó, como consecuencia de los problemas de cimentación, a 1.141 millones de pesetas, de los cuales corresponden a la construcción del puente tres cuartas partes. El resto se destinó a la realización de una variante de cinco kilómetros de carretera que permitirá el acceso al puente desde Barres, en Asturias, y desde Ribadeo. El puente, construido en la parte más septentrional de la ría, tiene un ancho de 12 metros y acoge dos carriles para la circulación de vehículos, amén de arcenes y aceras.

La obra, adjudicada por el MOPU como una más del Plan General de Carreteras, se inició hace cuatro años, en la primavera de 1983, y en su realización han llegado a participar hasta 100 operarios. Pese a la dificultad del proyecto, redactado por Manuel Julia Villardell, sólo se produjeron dos accidentes sin mayor importancia.

La construcción se conoce como Puente de los Santos, porque comienza en la capilla de San Román, en Asturias, y finaliza en la de San Miguel, ya en Ribadeo. Según José Luis Pérez de Castro, erudito e historiador de la zona, antaño existió otro proyecto, denominado de los Muertos porque iba desde el cementerio de Castropol, en Asturias, y concluía en las proximidades del camposanto de Ribadeo. Un tercer proyecto situaba el inicio del puente en Vegadeo (Asturias).

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_