Oposición a la gestión

Josep Maria Capdevila considera que las irregularidades en las pruebas del SIDA en Bellvitge han sido utilizadas para "romper un modelo de gestión del centro, actitud manifiesta tanto por el personal del hospital como por poderes ajenos". El ex director fundamenta la existencia de posibles oposiciones a su gestión en la disconformidad con los métodos que ha utilizado, como "controlar el trabajo del personal a mi cargo". El facultativo insiste en que "no tenía ningún interés en seguir en el cargo porque ya el año pasado presenté mi dimisión ante el Instituto Catalán de la Salud pero me pidieron que esperase hasta que dispusieran de un candidato idóneo".Una dirección que llama la atención a los facultativos por una cuestión de calidad asistencial "no está bien vista y en estas situaciones siémpre se acaba pasando factura", añade. Sin embargo, el doctor Capdevila precisa que este "resentimiento" se ha fundamentado más por "las formas de decir que por el fondo".

El ex director cree el caso se ha "magnificado" y que si hubiera ocurrido en otro centro habría sido diferente. En su opinión, Bellvitge tiene una situación de desventaja en relación con otros centros públicos. Esta situación la ha comprobado, afirma, en decisiones de otorgar algún nuevo servicio a . otros centros y no a Bellvitge".