La CE negociará con Japón una mayor apertura del mercado a productos españoles y portugueses

La Comisión Europea obtuvo ayer un mandato de los ministros de Asuntos Exteriores de los doce para negociar con Japón en el marco del Acuerdo General sobre Aranceles Aduaneros y Comercio (GATT), una mayor apertura del mercado japonés a los productos españoles y portugueses. Bruselas sostiene que las exportaciones de los dos Estados peninsulares al mercado nipón deben aumentar en más de 1.000 millones de dólares, unos 125.000 millones de pesetas.

Esta decisión fue tomada por una mayoría de los asistentes al Consejo de Ministros -España estuvo representada por Pedro Solbes, secretario de Estado- en contra de la opinión de las delegaciones de países como Francia y el Reino Unido, que consideran abocados de antemano al fracaso los intentos de conseguir concesiones de Tokio y piden que se adopten cuanto antes medidas proteccionistas.España someterá ahora una lista de producto,5 made in Spain que desea exportar en mayores cantidades a Japón y entre los que figuran algunos derivados de tomate, frutas en conserva, zumos de fruta, vinos embotellados, cavas, calzado, pieles de cordero, etcétera.

Subir el arancel

Si fracasase la negociación que en breve iniciará el Ejecutivo comunitario con Tokio, la CE examinará entonces la posibilidad de renunciar a la "consolidación" en el GATT de seis productos japoneses -tocadiscos compactos, grabadoras numéricas, órganos eléctricos, amplificadores, hornos microoridas y algunas piezas de vídeo- y en consecuencia podría incrementar substancialmente el arancel al que son sometidos.

La Comisión Europea pretende obtener contrapartidas en Ginebra,sed e del GATT, a cambio de la ampliación de la CE a España y Portugal, lo que obliga a los dos nuevos Estados miembros a reducir paulatinamente el arancel que imponen a las importaciones japonesas, hasta homologarlo con la, tarifa aduanera común (TAC) de la Comunidad, que se eleva a un 5%.

Gracias a esta reducción y a causa, también, de su agresividad comercial, los japoneses lograron incrementar sus exportaciones a la Península durante el primer año de adhesión (1986) en un 30%. equivalente a unos 1.200 millones de dólares (150.000 millones de pesetas aproximadamente).

Los jefes de la diplomacia de los doce acordaron, además, que cualquier desvio hacia el Viejo Continente de las expor taciones niponas a EE UU, que desde el mes pasado están sien do gravadas por la Administra cion norteamericana con un arancel del 100%, sería también sancionado por la Comunidad Europea con la imposición del mismo arancel. Las exportaciones hacia Europa de estos tres productos japoneses -ordenadores personales, televisores en color y herramientas eléctricas- cuyas ventas han caído en picado en EE UU, están siendo sometidas a una estricta vigilancia estadística por parte de la Comisión, para poder detectar cuanto, antes un incremento anómalo o "desviación de tráfico".

Aumenta el déficit

A pesar de esta vigilancia, el déficit comercial de la CE con Japón tiende a acentuarse, y el comisario europeo encargado de las relaciones económicas exteriores, el belga Willy de Clercq, anunció ayer a los ministros que en los cuatro primeros meses de este año dicho déficit ha aumentado en un 11%, rebasando los 7.500 millones de dólares. Las últimas estimaciones apuntan que para todo el año en curso se situará en 20.000 millones, 3.000 más que en 1986.

A lo largo del Consejo de Ministros se habló también de todos los problemas de política internacional y de la crisis financiera de la Comunidad Europea, sin progresar demasiado en este terreno. Leo Tindemans declaró que se trataba de "un problema de vida o muerte" para la Comunidad que tratará de solucionarlo en la próxima cumbre de jefes de Estado y de Gobierno que se celebrará en el mes de junio.