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FERIA DE SAN ISIDRO

Dámaso González quiere hacer el toreo de arte

El diestro Dámaso González actúa hoy por segunda ocasión en esta feria, alternando con Julio Robles y Emilio Oliva, que torean por primera vez en la presente edición. Lidiarán toros salmantinos de Atanasio Fernández. González promete hacer un tipo de toreo artístico y con gusto, alejado de su estilo valiente y pundonoroso.

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"Me han encasillado como un diestro de valor y poder", comenta, "lo que es cierto, pero creo haber demostrado, a lo largo de mis 19 temporadas de matador, algunas otras virtudes, como, por ejemplo, mi sentido del temple y la ligazón. No me gus ta presumir de nada, pero, junto a otros tres o cuatro diestros que todo el mundo conoce, nunca hago ascos a los toros de ninguna ganadería. Pocos pueden decir lo mismo. Lo malo es que te encasillan y siempre te echan a los leones mientras otros van siempre cómodos".Dámaso estuvo con poca confianza y ánimo en su primera corrida de esta feria, frente a toros de Pablo Romero, "que salieron muy mansos y a la defensiva", añade, "y con los que no se podía hacer nada".

Expone que esta tarde le encantaría torear con la mano baja y gustándose, pero que para ello es necesario que los toros que salgan se adapten a ese estilo: "Intentaré hacerlo como una concesión al público de Madrid con el que hice las paces hace ya muchos años, tras unas temporadas en que se dedicaban a con tarme el número de pases que daba. Ahora me respetan como un gran profesional, lo que es mi mayor elogio".

Julio Robles debuta en el ciclo isidril, en el que está anunciado dos tardes más. El salmantino sólo lleva toreadas cuatro corridas en la presente temporada "Me dejaron fuera de los carteles de Valencia, Castellón y Sevilla, creo que injustamente. Pero arrancaré con fuerza ya a partir de aquí".

El diestro de Fontiveros (Ávila), criado en Salamanca, dice conocer a la perfección los toros de la divisa a lidiar esta tarde. "En esta ganadería hago algunos tentaderos durante el invierno. Además, en la feria de Almería de 1985, frente a un toro de Atanasio, hice unas de las mejores faenas de mi vida. Me otorgaron el premio Capote de Oro al triunfador de la temporada en aquella ciudad andaluza".

Emilio Oliva también hace su primer paseíllo en la feria, aunque ya actuó en Las Ventas en el mes de abril, en una corrida que dice haberle valido para acrecentar su prestigio entre la afición de Madrid: "Entre mis dos excelentes faenas de la feria de 1986, malogradas con la espada y el descabello, y mi labor en el festejo del mes de abril pasado, creo haberme ganado los dos puestos que ocupo en los carteles de esta feria, con ganaderías y toreros importantes".

El diestro, que nació accidentalmente en Madrid, pero fue criado en Chipiona, de donde se siente, comenta que quiere tener ante la afición madrileña el mismo prestigio que alcanzó su padre en los sesenta: "Su estilo era distinto al mío, de mayor riesgo y emoción, pero yo, a mi manera, voy camino de conseguir que el público de Las Ventas me quiera tanto como a mi padre".

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