Falsa fachada

Se ha pasado de los tiempos de triste recuerdo en que se derribaban edificios por un afán especulativo a éstos en que se respetan viejas fachadas sin ningún valor artístico o histórico, suponiendo ello un aumento en los costes y en los riesgos de la construcción, no reflejando el conjunto del edificio una verdad árquitectónica. Uno de estos casos es el que expongo a continuación.El edificio del Banco Hipotecario de España, en el paseo de Recoletos, fue proyectado por Pascual y Colomer en el año 1850 como residencia del marqués de Salamanca, y mi maestro, el genial arquitecto Gutiérrez Soto, proyectó la ampliación que da a la calle de Olózaga, respetando la ordenación de la fachada primitiva y creándose con ello un bello conjunto que se realza actualmente con una magnífica iluminación.

Esta joya de la arquitectura madrileña se está ampliando por adquisición de la casa de viviendas colindante, no habiéndose derribado la fachada, pues, siguiendo la moda actual, queda sujeta con una estructura provisional al mismo tiempo que se vacía el interior. Creo que se está desperdiciando la ocasión de continuar la ordenación existente que hubiese mejorado el conjunto, siendo absurdo que fachadas que no tienen nada de excepcionales se respeten manteniéndolas artificialmente como una bambalina teatral.- Arquitecto.