Obreros y guardias civiles luchan cuerpo a cuerpo en Reinosa

Más de 60 personas resultaron heridas ayer en la localidad cántabra de Reinosa durante los violentos incidentes que se produjeron tras la liberación, por miembros de la Guardia Civil, de Enrique Antolín, que finalmente pudo desplazarse a Vitoria para tomar posesión como consejero de Obras Públicas y Transportes en el Gobierno autónomo vasco. Antolín, militante del PSOE, había sido retenido a mediodía del miércoles, cuando recogía sus efectos personales, por trabajadores de la empresa Forjas y Aceros de Reinosa, cuyo consejo de administración presidía.

Durante los enfrentamientos entre obreros y guardias civiles, en los que se llegó al cuerpo a cuerpo, varios agentes fueron golpeados y desarmados, sin que anoche hubieran side recuperados todavía un subfusil y una pistola. El ambulatorio de Reinosa quedó bloqueado por la afluencia de heridos. Los más graves fueron trasladados al centro médico Marqués de Valdecilla, en Santander. Allí fueron atendidas al menos 31 personas, de ellas 26 guardias civiles. Luis Roldán, director general de la Guardia Civil, elogió el comportamiento y la serenidad de sus subordinados que, "a pesar de haber sido agredidos y vejados, no han disparado ni un solo tiro".Varios miles de personas se manifestaron anoche pacíficamente en Reinosa en protesta por la crisis industrial de la comarca, uno de cuyos principales exponentes es Forjas y Aceros, para cuyo saneamiento había presentado Antolín un plan de reconversión que preveía una notable reducción de plantilla. La manifestación congregó a gran parte de la población, que cuenta con 13.000 vecinos. Fuerzas de la Guardia Civil controlaron el desarrollo de la marcha sin intervenir.

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Editorial en la página 12