Martirio cantó el pregón del carnaval de Huelva
Maribel Quiñones -Martirio-fue el jueves la pregonera del Carnaval 87 de Huelva. Al encontrarse en su tierra, más Maribel que Martirio, arrancó con un fandango variando los últimos versos de una famosa letra para aludir a la contaminación que sufre el litoral onubense: "Tres cositas tiene Huelva / que no las tiene Madrí: / La Rábida, Punta Umbría / y los pescaítos muertos. / ¡Ésa es la penita mía!".
Ataviada con su habitual indumentaria -gafas oscuras, peineta con tres carabelas y mapamundi, y traje estampado de corte torero-, Martirio dejó claro que estaba mala: "Que es verdá que estoy mala, que me he tenío que toma una pastilla". La cantante abrió su cofre mágico del tiempo para volverse "chiquinina" y salpicar su pregón de recuerdos infantiles: "En las tardes de primavera aprendíamos sevillanas en los bailes de la Cruz de Mayo, frente al Agromán", "yo soy ésa, volviendo atrás la cabeza, corriendo como loca del colegio al quiosco del Barrio Obrero, a por un polo de nieve, de esos que al chuparlos se quedan blancos por la punta".
El patrón de la ciudad también formó parte del pregón: "Me da la mano cuando llega la hora de los martirios como flechitas de San Sebastián, ¡que hay que vé que santo más enrollaíto tenemos!, ¡ole los patrones guapos!". Pese a la escasa asistencia de público, Martirio en su corto pregón, llamó a la participación de los ciudadanos en el carnaval: "¡Poderío al poder, los carnavales perdíos ya están en Huelva otra vez!", "a la calle, que ya es hora de enseñarnos nuestros cuerpos, y anunciar que, pues reímos, ya no nos asusta el miedo".
Babelia
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