El Bundesbank interviene, por segundo día, en apoyo del franco y descarta revaluar el marco

El Gobierno federal alemán y el Bundesbank reiteraron ayer su oposición a revaluar el marco, pese a que el banco federal alemán trató en una reunión especial las tensiones que afectan a las ocho monedas que componen el Sistema Monetario Europeo (SME). Aunque a menor escala, el banco emisor germano mantuvo su intervención en los mercados -que el día anterior forzó una operación de apoyo al franco de 5.000 millones de marcos-, tanto en defensa de la moneda francesa como impidiendo una caída adicional del dólar norteamericano. En París, el Gobierno de Chirac insistió en que no devaluairá el franco.

El ministerio de Economía francés reiteró ayer su oposición a una eventual devaluación del franco, informa Lluis Bassets. Según fuentes oficiales francesas, el Gobierno de la RFA debe proceder a revaluar su moneda o a bajar las tasas de interés. Para el primer ministro, Jacques Chirac, "el franco no está debilitado, sino reforzado desde hace cuatro meses frente a todas las monedas del mundo, salvo el Marco".La interpretación oficial francesa intenta soslayar los posibles defectos de la huelga de ferrocarriles, amplificada ahora a otros servicios públicos, para centrar la cuestión en la buena marcha del marco alemán y en la negativa del Gobierno federal a revaluar antes de las elecciones del 25 de enero, para evitar una impopular disminución de las exportaciones.

En Bruselas, según informa Ignacio Cembrero, fuentes comunitarias señalaron que el alza del marco alemán y la baja del franco francés supone un nuevo desafio para el Sistema Monetario Europeo (SME) y la persistencia de estas tensiones puede generar una crisis de confianza entre los Estados que en 61 participan.

Reajuste inevitable

En círculos comunitarios no cabe ya la menor duda que deberá producirse un reajuste en el seno del SME y la única cuestión pendiente es si tendrá lugar antes o después de las elecciones generales en la República Federal de Alemania previstas para el próximo 25 de enero. Las monedas de ocho de los doce países miembros de la Comunidad Europea (CE) forman parte de este Sistema -la peseta no está integrada-creado en 1979 para garantizar un cambio relativamente estable que no perjudique al comercio.Todas estas divisas europeas, exceptó la lira italiana, pueden fluctuar un 2,25 % por encima y debajo de la paridad que les ha sido asignada y cuando se acercan o alcanzan, por ejemplo, su máxima cotización autorizada, los bancos centrales están obligados a intervenir vendiendo la moneda fuerte para que no rebase el "techo" fijado. Una intervención prolongada acaba generalmente en un reajuste del SME.

A diferencia de anteriores crisis en el seno del sistema, la actual se acompaña de una polémica entre París y Bonn sobre la determinación alemana de defender el franco francés, que varios días seguidos cayó en picado hasta alcanzar su cotización mínima permitida de 3,3303 por un marco alemán. En esta discusión, el presidente de la Comisión Europea, el francés Jacques Delors, comparte el punto de vista galo.

Francia se ve respaldada en Bruselas por la debilidad que las divisas de otros cinco países -Bélgica y Luxemburgo, Dinamarca, Irlanda e Italia-, que dan señales de inestabilidad en el SME, mientras sólo el florín holandés secunda la tendencia alcista del marco.

En Madrid, el dólar continuó apreciándose ligeramente ya que, según todos los indicios, el Banco de España mantuvo una discreta intervención. El dólar cambió, 132,248 pesetas, tras realizar un cambio de 131,85 pesetas el día anterior.