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La Biblioteca Nacional se convierte en centro dedicado a la investigación

Facilidades para el científico y dificultades para el estudiante

La Biblioteca Nacional es a partir de este año un centro dedicado exclusivamente a la investigación, con la entrada en pleno funcionamiento de normas que buscan evitar el desvío de recursos a la atención de lectores y universitarios, y centrarlos en la ayuda al investigador. El destino de la Biblioteca Nacional como centro de investigación -misión que pocos interesados niegan ha de cumplir una biblioteca de estas características ha sido, sin embargo, criticado por un sector de los usuarios, en su mayor parte estudiantes, que no encuentran bibliotecas públicas ni salas de lectura adecuadas donde poder estudiar.

La definición clara de la Biblioteca Nacional como un centro de investigación -reforzada tras el nombramiento del último director, Juan Pablo Fusi- ha supuesto en las últimas semanas la adopción de medidas como el cierre de la biblioteca de préstamo, por ser ésta una función típica de la biblioteca pública.De momento se mantiene abierta una sala universitaria, destinada al estudiante universitario, pero sólo hasta que sean inauguradas las salas de San Agustín, unas antiguas dependencias de la Hemeroteca Municipal situadas frente a las Cortes, que se decidió habilitar como biblioteca en cierto modo universitaria, una vez aprobada la reforma de la Biblioteca Nacional. En principio, estas salas serán inauguradas en primavera.Desde primeros de diciembre se han puesto en marcha en la Biblioteca Nacional normas que se pretende reforzar en este mes enero, y que tienen por objeto "cribar lectores", según inFormaron fuentes de la dirección del centro. Es decir, se pretende facilitar el trabajo del investigador y dificultar el acceso al que no lo es.

Normas restrictivas

Hasta ahora, los tipos de usuarios de la biblioteca han estado muy mezclados, y el hecho de que se haya utilizado ésta como una biblioteca pública obliga ahora a dictar unas normas que pueden parecer restrictivas, dijeron las fuentes.La necesidad de dictar estas normas proviene sobre todo de la escasez de recursos. Cuando el centro funcionaba como una biblioteca pública, algunos días el 70% de las plazas de las salas estaba ocupado por alumnos que habían acudido a estudiar sus apuntes o a leer manuales. Labores no adecuadas a un centro como éste, dicen las fuentes, conel consiguiente desperdicio de los ya de por sí pobres recursos humanos.

Por ejemplo, la biblioteca cuenta con dos hombres para trasladar libros en cuatro plantas de depósito. La carencia mayor es de personal subalterno, después de cierto alivio en la escasez de personal bibliotecario tras lasúltimas oposiciones. Aun así, la pobreza de recursos humanos sigue siendo grande. .

La medida que se pretende sea definitiva para la selección del usuario es la revisión de los carnés de investigador existentes en la biblioteca y una ampliación de los requisitos para conseguirlo. Antes se necesitaba una cartade presentación firmada por dos profesores universitarios, que se había convertido en una fórmula en la que bastaba incluir el nombre.

También se pedía una breve memoria de los trabajos a realizar. A partir de ahora se pedirá un breve currículo-del aspirante, una memoria de tres folios en la que se justifique la necesidad de consulta de los fondos de la biblioteca, una relación más o menos detallada de la bibliografla que se pretende consultar y una carta de presentación mínimamente individualizada.

De acuerdo con las fuentes, estas medidas beneficiarán al investigador, que pasará de una situación en la que algún día se encontraba con dificultades para poder sentarse a tener un mayor servicio. Ahora, por ejemplo, podrá pedir varios libros al tiempo, lo que no era posible antes, y el personal que atiende al público será cualificado, tanto en el salón de estudio como en el acceso a la biblioteca.

Menos asientos

Las personas no investigadoras, en su mayor parte estudiantes, siguen teniendo acceso a la sala universitaria, y el número de asientos a ellas destinados en el salón de estudio se ha reducido a la mitad. En esta sala han perdido el acceso a los fondos y sólo pueden utilizar los libros de acceso directo.Novedad de interés es la paulatina creación de un servicio de bibliografia, una sección primordial en toda biblioteca de este tipo y algo descuidada hasta el momento en la Nacional. Se trata de la sección en la que un usuario puede consultar qué libros y documentación existen sobre determinado tema, con independencia de los que existan en ese centro, con el objeto de poder seleccionar sus materiales y planear su trabajo.

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