Eloy Gutierrez Menoyo regresa a España tras permanecer preso 22 años en Cuba

Eloy Gutiérrez Menoyo, ex comandante de la revolución cubana, regresó ayer a Madrid tras permanecer 22 años en prisión en Cuba por intentar derrocar el régimen impuesto por su antiguo compañero de armas Fidel Castro. Su hija, Elena Patricia, de 24 años, esperaba el vuelo de la compañía Cubana de Aviación para conocer físicamente a su padre, de 52 años, a quien el pasado día 17 se le anunció su inminente liberación. Su puesta en libertad es considerada por el Gobierno como una muestra de gratitud del Ejecutivo cubano por la reciente visita oficial de Felipe González a La Habana.

El recién liberado se mostró firme y seguro ante los periodistas y anticastristas que le aguardaban en el aeropuerto de Barajas, desde donde agradeció las muestras de solidaridad "mientras estaba en cárceles y mazmorras". Gutiérrez Menoyo, que fue acompañado en el viaje por dos funcionarios cubanos y por el embajador español en La Habana, Antonio Serrano, fue recibido por el director general de Asuntos Consulares, Rafael Pastor Ridruejo, y policías españoles al pie del avión sobre las 11.50 de ayer. (La aeronave que le condujo a Madrid quedó estacionada en un lugar alejado de la terminal del aeropuerto).A bordo de un coche policial, el ex comandante de la revolución fue trasladado a la comisaría del aeropuerto, donde le esperaba su hija Elena Patricia, -fruto de su matrimonio con la cubana Tania Salas actualmente casada en segundas nupcias, quien se desplazó desde Puerto Rico para recibirle-, su hermana Sara y otros familiares.

El buen aspecto del veterano comandante contrastaba con la preocupación que hace unos días mostraban disidentes cubanos, que dudaban incluso de que estuviera vivo. Elena Patricia, que se casa en febrero próximo y que ha elegido como padrino de la ceremonia a su padre, estaba más emocionada y no dejaba de sollozar mientras su padre la abrazaba. Gutiérrez Menoyo, vestido con un anticuado traje gris y una camisa blanca, movía su brazo derecho como un auténtico profesional del mitin, mientras concluía su cigarrillo sin emboquillar. Su hermana Sara, que tuvo que venir "a toda prisa desde Avilés", aguardaba un paso atrás protegida del frío por un chaquetón de visón negro.

En el mismo aeropuerto, Pastor Ridruejo y los funcionarios cubanos firmaron un acta de entrega que consta de tres partes. En la primera, se dice simplemente que Gutiérrez Menoyo es entregado a las autoridades españolas. En la segunda, que el estado fisico del ex preso es bueno, y la tercera es un historial médico. El ex comandante cubano presentó documentos de identidad cubanos y españoles.

Muy cansado

Las primeras declaraciones de Gutiérrez Menoyo en Madrid fueron de reconocimiento a los Reyes de España -a quienes, en un desliz provocado por su nerviosismo, calificó de "funcionarios"-, al Gobierno y al pueblo español por las gestiones realizadas en su favor. "Estoy agotado y muy cansado, .pero no por el viaje, sino por la emoción vivida en mi llegada", añadió.

El centenar de exiliados cubanos que recibió en el aeropuerto de Barajas a Gutiérrez Menoyo no pudo contener su emoción cuando el liberado les habló desde lo alto de una escalera. Gritos de "muerte al comunismo de Fidel", "viva Menoyo" y "Cuba vencerá" fueron emitidos por los exiliados, que expresaban su euforia por la liberación.

Entre las decenas de familiares y amistades que convergieron en Madrid desde diversos se encontraban dos antiguos compañeros: Rolando Cubela y Armando Fleites. Este, que luchó junto a Gutiérrez Menoyo en la guerrilla y hoy es dirigente de un grupo anticastrista, se desplazó desde Miami, donde reside, al tener conocimiento de la liberación de su antiguo jefe. La liberación fue acogida con "enorme alegría" por la colonia cubana en Miami, informa Efe.

El retorno a España del ex comandante de la revolución se inició con gran sigilo a las 21.30, hora local cubana del sábado [3.30 del domingo, hora española], cuando despegó del aeropuerto José Martí, de La Habana, el avión que condujo a Madrid a Gutiérrez Menoyo tras haber sido liberado por las autoridades cubanas. El combatiente anticastrista permaneció un tiempo en el departamento de inmigración del aeropuerto cubano antes de ser embarcado en el vuelo 470 de Cubana de Aviación. Media hora antes de que el avión despegara, dos automóviles soviéticos, ocupados por 10 agentes policiales y de inmigración, trasladaron a Gutiérrez Menoyo hasta las escalerillas del avión.