Un general culto y demócrata, según Labaien
Poco más de un año llevaba en San Sebastián el gobernador militar de Guipúzcoa, el general Rafael Garrido, y ya se había ganado las simpatías de muchos políticos vascos que llegaron a conocerle, entre los que se encontraba la mayor parte de los concejales, que ayer se fueron acercando hasta el lugar donde se produjo el atentado y permanecieron en él hasta el momento en que fueron retirados los cadáveres del matrimonio Garrido. El alcalde de la ciudad, Ramón Labaien, emocionado, lo describió como "un hombre de una personalidad extremadamente atractiva". "Era un militar muy culto", dijo; ",un gran melómano y un demócrata que aceptaba la realidad de este país con todas sus consecuencias".Rafael Garrido llegó a San Sebastián procedente de Borin, donde había sido agregado militar en la embajada española. Pidió el destino que tenía y, poco antes de haber tornado oficialmente posesión, asistió a, varios conciertos musicales.
Afíción por la montaña
Otra de las aficiones del general Rafael Garrido era la montaña. Todos los domingos subía a algún monte de Guipúzcoa y su afición por este deporte se la transmitió a uno de sus; hijos, Fernando Garrido, que, consiguió el pasado año el récord del mundo de permanencia en alta montaña después de haber pasado 60 días en el Aconcagua.
Recientemente, el general recordó en una nota pública que, en caso de registrarse acciones; violentas o agresivas contra. el edificio del Gobierno Militar -como había sucedido en otras ocasiones-, los soldados de vigilancia tendrían que hacer uso de sus armas.
Rafael Garrido ha sido el segundo gobernador militar de San Sebastián asesinado en un atentado. El 23 de septiembre de 1979, el general Lorenzo González Vallés, entonces g0bernador militar de la plaza, fue asesinado por un individuo que le disparó un tiro en la sien cuando el militar caminaba en compañía de su esposa por el paseo de la Concha.
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