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La democracia cristiana busca en su congreso que el debate nuclear en la RFA se vuelque a su favor

El congreso anual de la Unión Cristianodemócrata Alemana (CDU), que comienza hoy en Bonn, intentará volcar en su favor el debate sobre la energía nuclear en la RFA, un tema clave ante las próximas elecciones, mediante la aprobación de un manifiesto de futuro, en el que los delegados expresarán su compromiso con el progreso técnico.

El partido celebra su congreso tras una nueva perdida de votos en las elecciones municipales del Estado de Baja Sajonia, celebradas el domingo. La CDU conservó la mayoría, pero perdió más de tres puntos, mientras socialdemócratas (SPD) y verdes fortalecieron sus posiciones. No obstante, todos los sondeos dan aún a la CDU como clara favorita a ganar las elecciones en enero y volver a formar coalición con los liberales.La dirección de la CDU, encabezada por el canciller (jefe de Gobierno) Helmut Kohl, ultimó en una reunión celebrada ayer en Maguncia los preparativos para este 34º congreso, que reunirá durante dos días a 780 delegados. Hoy, hablará ante el congreso Franz Josef Strauss, presidente del partido hermano bávaro, la CSU.

Según fuentes del partido, con la aprobación del documento de futuro y las resoluciones que se produzcan en relación con la energía nuclear, los cristianodemócratas intentarán pasar a la contraofensiva en el debate energético en la RFA, en el que han sufrido reveses en los últimos tiempos. Dos informes encargados por el Gobierno cimentaron el pasado mes la tesis socialdemócrata según la cual el abandono de la energía nuclear es factible sin consecuencias dramáticas para la economía. La CDU, partidaria del mantenimiento y expansión de esta fuente de energía, continúa, vaticinando muy graves efectos para la RFA de consumarse el rechazo a la energía nuclear que defiende la oposición parlamentaria.

Algunos sectores cristianodemócratas insisten en que el partido debe tomar en serio las preocupaciones de la población alemana, aún sacudida por los temores originados por el accidente de Chernobil. No obstante, prevalece la tendencia a presentar la propuesta de rechazo a la energía atómica como un proyecto demagógico que llevaría a la RFA a la ruina.

Este argumento jugará un papel fundamental en la campaña electoral, en la que la CDU quiere presentarse como la única alternativa al fantasma de una coalición rojiverde entre socialdemócratas y el partido ecopacifista que supondría dejar la república a merced del empobrecimiento y los tanques soviéticos.

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