_
_
_
_

El empleo asalariado crecerá este año en más de 200.000 personas, según Economía y el Banco de España

El Gobierno y el Banco de España proceden estos días a revisar al alza sus estimaciones sobre el aumento de empleo para el presente año, pese al creciente pesimismo existente en otros medios sobre el ritmo de la actividad económica. Hasta ahora, el Ministerio de Economía y Hacienda había apuntado oficialmente que la ocupación crecería de 100.000 a 150.000 personas. Pero sus últimos informes al Ejecutivo llegan a una media de 180.000. Igualmente, el Banco de España considera la posibilidad de que el crecimiento del empleo asalariado se aproxime a las 250.000 personas, si bien el número de ocupados subiría poco más de la mitad por la caída de los autónomos.

La marcha "excepcionalmente buena" del mercado de trabajo, en opinión de fuentes informadas, ha animado al ministro de Economía y Hacienda, Carlos Solchaga, a solicitar su próxima comparecencia en el Congreso de los Diputados con el fin de hablar sobre el empleo y la economía sumergida, prevista para principios de octubre. Para entonces podrían ser confirmadas las primeras impresiones, filtradas desde el Instituto Nacional de Estadística, en el sentido de que la encuesta de población activa (EPA) del tercer trimestre mejorará las dos anteriores.De momento ha trascendido que, en sus más recientes informes al Gobierno, Economía asegura que el número total de ocupados crecerá este año en un promedio del 1,75% respecto al nivel de 1985, en que fueron 10,26 millones de personas. Hasta ahora, las previsiones más optimistas, lanzadas oficialmente la pasada primavera por Solchaga, después de varios, años de silencio gubernamental en lo tocante a objetivos de empleo, hablaban de un incremento situado entre las 100.000 y las 150.000 personas (del 1% al 1,5%).

El incremento de empleo esperado actualmente será bastante mayor entre los asalariados, de forma que compense la nueva caída del número de autónomos y otros ocupados. Expertos ajenos a la Administración se muestran de acuerdo con estas perspectivas.

También el Banco de España parece inclinado a revisar al alza sus estimaciones de ocupación y empleo, según fuentes informadas. Su último estudio de coyuntura, publicado en agosto pasado, vaticinaba en el primer caso un incremento del 1,2% (en torno a los 120.000 empleos), coincidente con la media de las anteriores estimaciones gubernamentales. A la vista de la EPA del segundo trimestre, parece que el servicio de estudios del banco emisor elevará sus estimaciones en varias décimas, lo que supondría vaticinar para los asalariados un cuarto de millón más que durante 1985.

Sector público

Tanto el Banco de España como otros analistas ajenos a la Administración esperan que el crecimiento del empleo sea nuevamente mayor en el sector público que en el privado, nutrido por 5,4 millones de trabajadores. El último informe del banco emisor apunta para el sector privado un incremento del 2,5%. Esto implicaría que las plantillas del sector público (1,7 millones) se engrosarían en un promedio de 80.000 personas. Las promesas en que se basan todas las anteriores estimaciones suelen tener a estas alturas del año una fiabilidad aceptable.La estimación de que el crecimiento del empleo total será reforzada por el sector público, al que se debió principalmente la recuperación del pasado año, era avanzada por un informe sobre la economía española que elaboró la Comunidad Europea (CE) antes del verano. La Comunidad, mucho menos optimista que Economía y el Banco de España, vaticinaba un 0,6% de aumento en la ocupación (61.000 personas), el 1,4% en el empleo asalariado (100.000 personas) y el 0,9% en los trabajadores del sector privado (51.100). Es decir, las plantillas públicas aumentarían en 48.900 personas, según la CE.

Más erráticas y difíciles de vaticinar con acierto resultan las cifras del paro, en la medida en que las mejores perspectivas de empleo animan a los desempleados a buscar trabajo. Pero si se mantuvieran las tendencias del incremento de la población activa -cerca del 0,7% respecto a los 13 millones del pasado año- resultaría que en 1986 descendería el paro por primera vez en las dos últimas décadas. De hecho, las demandas de trabajo registradas por las oficinas de colocación se han reducido de forma ininterrumpida desde marzo hasta agosto, si bien en los dos últimos meses su descenso ha sido muy inferior al de 1985.

En cualquier caso, las mejores perspectivas de empleo, por ahora no tan buenas para 1987, llegan cuando los analistas de la coyuntura proceden desde después del verano a revisar a la baja sus previsiones de crecimiento económico para 1986, para situarlas algo por debajo del 3%. El menor optimismo respecto al ritmo de actividad internacional, el débil pulso de las exportaciones en los últimos meses, el freno en la caída de los precios del petróleo y de la cotización del dólar se han sumado al deterioro de la actividad agraria -el sector que más empleo destruye- y a la erosión causada en el consumo privado por el rebrote de los precios de la alimentación.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_