Cow-boys' junto al Manzanares
La gira española del cuarteto norteamericano Long Ryders tuvo anoche su inicio en la madrileña sala Astoria. El grupo, formado por Syd Griffin, guitarra, armónica y voz; Greg Sowders, batería; Stephen McCarthy, guitarra, bajo y voz, y Tom Stevens, bajo y voz, hizo su entrada en el escenario con el aforo de la sala casi cubierto.Irrumpieron con la belicosa El Ejército del Ebro, en versión ininteligible, que dio la señal para que el torrente de música eléctrica que provocan los Long Ryders se esparciera por la sala. Syd Griffin chapurreó en español "Buenas noches, cómo está", recibiendo vítores y aplausos del público. El grupo, con aspecto todos de simpáticos miembros de la secta Amys de Filadelfia, fueron descargando y repartiéndose las voces solistas, un material de rock and roll que evocaba continuamente el espíritu de Dylan, los Byrds y Parsons. Temas como Rest of my tears y Tell it to the judge on sunday provocaron el delirio de los asistentes, mientras el calor por el concurrido espacio físico y la rudeza de las composiciones interpretadas hacía a más de uno quitarse la cazadora. Tras un total de 17 canciones, sonó aproximadamente una hora y cuarto después el tema más conocido del grupo en España, Looling for Lewis and Clark, una polvorienta epopeya musical que evoca las raíces del sur de los Estados Unidos, con los colores del bourbon, bebida nacional de Kentucky.
