La juez encarga a la Ertzantza que investigue las escuchas telefónicas al ex 'lendakari'

Ester Erice, la juez titular del Juzgado de Instrucción de Azpeitia encargada del sumario sobre las escuchas ilegales al ex lendakari Carlos Garaikoetxea, anunció ayer en una conferencia de prensa celebrada en esta localidad guipuzcoana que las investigaciones del caso serán encomendadas a la Ertzantza (policía autonómica vasca). La juez se mostró decidida a no reconsiderar esta decisión aunque los representantes legales de Carlos Garaikoetxea y de la Compañía Telefónica aleguen en contra.

A lo largo de la conferencia de prensa, Ester Erice invocó reiteradamente el secreto sumarial para soslayar las preguntas dirigidas a profundizar en los hechos denunciados y se negó a precisar las fechas, al parecer recientes, en que miembros de la Guardia Civil y de la Ertzaritza instalaron dispositivos de escucha en la subcentral de Zarauz. "Esta información", dijo, "podría entorpecer las investigaciones de otros sumarios". Afirmó, eso sí, que las diligencias se están haciendo con celeridad, "dado el interés suscitado por el caso", se mostró esperanzada en obtener rápidos resultados y declinó responder a la pregunta de si, además del enlace descubierto en la subcentral de Zarauz entre las líneas de Garaikoetxea y las del abonado de Orio, Luis Olaskoaga, se han detectado otras manipulaciones.Tampoco los portavoces de la Telefónica se mostraron ayer más explícitos, aunque tampoco ocultaron su opinión de que las investigaciones judiciales aclararán definitivamente un caso que el sector oficialista del PNV atribuye pura y simplemente a un montaje de los críticos.

Cabe recordar, sin embargo, que el mismo día en que fue hecha la denuncia, fuentes oficiales de la Telefónica aludieron a una tercera derivación en la línea de Carlos Garaikoetxea desde la que se había llevado a cabo el intento de control de las conversaciones del ex lendakari.

Algunos empleados de Telefónica creen que las Fuerzas de Seguridad del Estado disponen de las llaves de las subcentrales para poder intervenir los teléfonos designados por el juez, cuando los edificios están vacíos y sin vigilancia. Una fuente de la Telefónica se limitó a indicar que la compañía facilita el acceso policial a sus centrales a la hora que sea, siempre que tanto la empresa como la policía cuenten con la orden judicial.