El gobernador de Tarragona pide que se investiguen las paradas de la central de Ascó
LOLA LARA, El gobernador civil de Tarragona, Vicente Valero, remitió ayer una nota al presidente del Consejo de Seguridad Nuclear pan instarle a que impulse las investigaciones encaminadas a esclarecer las sucesivas paradas que se han producido en la central nuclear Ascó II. Desde el viernes, la planta ha sufrido dos disparos de emergencia (paralizaciones). El primero se produjo en la mañana de viernes, y el segundo en la madrugada del sábado. Desde el 1 de julio, la central, cuyo grupo I se halla inactivo, ha tenido cinco paradas de emergencia.
El escrito del gobernador insta al Consejo de Seguridad Nuclear a que "de modo inmediato y con carácter de urgencia, instruya la investigación pertinente y recabe los datos necesarios para dar cumplida información a este Gobierno Civil".El escrito señala, además, "la coincidencia de tales disfunciones con el período estival" y que, sin embargo, "no han supuesto riesgo para la población".
Según informa Europa Press, la causa de este segundo disparo del reactor tal vez se halla en una boya -perteneciente al citado circuito- que marca el nivel de aceite; si éste es insuficiente o se produce un descenso de la boya, se activa un relé que paraliza las turbinas y el reactor para impedir que se sobrecaliente.
La central no retomó su función, ya que los técnicos realizaron en este tiempo un estudio a fondo para tratar de averiguar las causas por las que dicha válvula se cerraba sin motivo aparente, impidiendo la entrada de agua en el generador de vapor.
Sin embargo, la inspección no tuvo éxito y no encontró justificación alguna a estos cierres espontáneos, por lo que fue necesario realizar una serie de modificaciones en el funcionamiento de estas válvulas.
En el momento de producirse la segunda parada, la central se encontraba traba ando sólo al 15% de su potencia.
La paralización del viernes se produjo como consecuencia del cierre de la válvula de aislamiento de agua en uno de los generadores de vapor, vinculado al sistema secundario de refrigeración del reactor. Una vez subsanada la anomalía, la planta volvió a funcionar, pero diez horas más tarde se produjo un nuevo paro. En esta segunda ocasión, el fallo se registró en el circuito de refrigeración por aceite de cada uno de los tres transformadores que constituyen el generador eléctrico de la central.
El pasado 1 de julio ya se paró automáticamente el reactor por "el bajo nivel de un generador debido a una disfunción en la lógica de regulación", según informó la central.
El día 23 de julio, un fallo en el funcionamiento de una de las tres válvulas del generador de vapor paralizó nuevamente Ascó.
La central entró de nuevo en servicio el 4 de agosto, y el día, 6 de agosto se paró de nuevo al inundarse el edificio conocido como "casa de bombas" que alberga los motores necesarios para elevar el agua del río Ebro a la propia central.
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