La sutileza como exigencia

C. V., La visita de don Juan Carlos a Irlanda, aparece marcada por una especial sutileza en las manifestaciones públicas del Rey. El hecho, fácilmente constatable, fue confirmado ayer en fuentes diplomáticas españolas. Cuatro factores al menos abonan esta característica que marca el viaje real: la especial situación de la República de Irlanda, con el conflicto del norte; la condición española e irlandesa de países que mantienen contenciosos de entidad con la Gran Bretaña; el terrorismo del IRA en Irlanda del Norte, e incluso las similitudes, sin fundamento histórico, que en algún momento se han establecido entre el problema de Gibraltar y el de Irlanda del Norte, por un lado, y la violencia en el País Vasco y en el Ulster por otro.

La situación de Irlanda

Ello explicaría que el Rey Juan Carlos no haya hecho especial hincapié en los problemas del terrorismo, como suele ser frecuente en sus discursos. Del mismo modo se ha referido a la división irlandesa con extremo cuidado, aunque no haya ocultado la posición española favorable a la pacificación definitiva de Irlanda.

Al referirse a los acuerdos de noviembre entre Irlanda y el. Reino Unido, don Juan Carlos expresó su esperanza de que "en un futuro no lejano, sus consecuencias positivas se concreten en el logro de un alto grado de convivencia entre todos los irlandeses".